Patriotas de Malvinas: Héroes, no víctimas

  • Imagen
    Malvinas
    Malvinas
SOBERANIA NACIONAL

Patriotas de Malvinas: Héroes, no víctimas

06 Mayo 2024

El jueves 2 de mayo pasado se cumplió un nuevo aniversario del hundimiento del Ara General Belgrano- ordenada por la enemiga del pueblo argentino Margaret Thatcher- en el cual entregaron la vida en defensa de la soberanía nacional 323 patriotas argentinos.

Este nuevo aniversario nos permite además de ofrecer nuestro homenaje a los héroes de la Patria, también reflexionar seriamente sobre el posicionamiento del peronismo y el kirchnerismo sobre este conflicto con una potencia imperialista que ha sometido a nuestro país durante tres siglos. Asimismo, un episodio en el que una docente en un acto por el 2 de abril decidió no homenajear a los soldados y revindicar su gesta patriótica sino hacer hincapié en la crítica a los medios de comunicación de la época, nos llama a una serie de conclusiones.

Desde AGENCIA PACO URONDO hemos sido muy críticos con cierta mirada dentro de nuestra fuerza política que ha convertido a nuestros héroes “en víctimas de un dictador borracho”. En 2023, Tahiana Marrone, veterana de Malvinas se explayó en una entrevista con este portal sobre el proceso de desmalvinización y sostuvo: “El expresidente Raúl Alfonsín nos negó, nos olvidó, nos consideró unos parias, hizo que la gente nos tratara de loquitos” (algo interesante a reflexionar respecto a dirigentes dentro del peronismo que revindican a Alfonsín por su progresismo).

En este mismo sentido, la heroína de guerra señaló sobre el ex mandatario socialdemócrata: “Hizo que la gente también nos olvidara, hizo que ni nosotros ni la gente pudieran hablar de la gesta de Malvinas, era mala palabra en esa época. Tal es así que cuando empezamos a armar la famosa ´carpa verde´, buscando una ayuda por parte del Estado, nos tildaron de ´los loquitos de Malvinas y no los soldados de la guerra´".

Si nuestro líder el General Perón decía primero la patria, después el movimiento y luego los hombres: ¿Qué honor podría darse a hombres que han luchado en una guerra anticolonial en defensa de nuestra integridad territorial? Tal como hemos propuesto una revisión autocritica del imaginario kirchnerista en la discusión de la figura de José Ignacio Rucci y su rol en el movimiento obrero organizado, también lo hemos hecho en el caso de Malvinas.

En 2012, entrevistamos al excombatiente Cesar Trejo quien reflexionó sobre el conflicto e indicó: “Nosotros no tenemos víctimas, tenemos héroes de Malvinas, no tenemos víctimas por las cuales hay que llorar, hay que recordar con la dignidad de aquellos que dieron su vida por nuestra Patria”. Además, Trejo sostuvo en ese momento sobre el rol de la CGT que revindicó la lucha de los combatientes frente al proceso desmalvinización iniciado durante el alfonsismo: “Mientras todo el mundo nos daba la espalda… algún puñado de argentinos quizás, yo recuerdo a Jorge Abelardo Ramos junto a las organizaciones sindicales las que nos dieron cobijo, las que nos permitieron desarrollarnos y las que tuvieron la valentía de seguir reivindicando la causa nacional y popular de Malvinas, a pesar de que eso era mala palabra en ese momento. En eso expresamos nuestra gratitud al movimiento obrero organizado”.

En otra entrevista realizada con APU, en mayo 2022, Trejo desarrolló: "La guerra de Malvinas, más allá de las elucubraciones que pudieron tener los jerarcas militares -que jamás pensaron la guerra, sino un evento que en su analfabetismo estratégico supusieron una ´solución´ por la vía mediadora norteamericana-, fue resignificada por el pueblo argentino y por el resto de los pueblos de Nuestra América, como una lucha anticolonial. Los soldados que participamos en ese acontecimiento histórico, lo hicimos como parte del pueblo argentino. Para encontrar el sentido de nuestra participación en esa gesta (y el sacrificio de quienes dejaron sus vidas en la misma), tuvimos que bucear en nuestra Historia, e interpretar que se trató de un eslabón de una larga cadena de sucesos históricos enmarcados en la permanente relación asimétrica entre el Reino de España y el Reino de Gran Bretaña, primero, y las Provincias Unidas del Sur- la Confederación - la República Argentina y Gran Bretaña, luego”.

Por último, siempre es interesante reflexionar sobre la mirada más lucida de quien fuera el padre de la izquierda nacional, Jorge Abelardo Ramos, quien señaló en relación a la guerra: “Cuando está en juego el suelo de la patria, sólo un cipayo puede preguntarse si el gobierno que conduce la guerra le gusta o no. Si San Martín hubiese renunciado a luchar contra el Imperio español al descubrir a su llegada a Buenos Aires la catadura de Rivadavia y Pueyrredón, quizás seríamos todavía súbditos del rey de España.”

Además, Ramos señalaba que “la mayor parte de los partidos políticos argentinos habían apoyado directamente al régimen nacido el 24 de marzo de 1976 y habían ocupado (y siguen ocupando hoy) miles de cargos, desde intendentes hasta ministerios provinciales, ministerios nacionales y embajadas. Sólo se alejaron del gobierno (pero no de los cargos mencionados) cuando el histórico giro del 2 de abril puso en evidencia que la Argentina había entrado en conflicto con las pérfidas potencias del Occidente colonialista y sus aliados de la usura mundial. Entonces descubrieron muchos de estos partidos que este régimen era una dictadura”.

En mismo sentido, Ramos consideraba que “con las tropas argentinas en las Malvinas, saltó en pedazos el TIAR y la Doctrina Monroe quedaron en paños menores, los simuladores de la democracia europea y los admirados yanquis de Alexis de Tocqueville, en suma, los modelos ideales en que habían sido educados los oficiales de las tres armas en la Argentina. Volvimos nuestras miradas hacia la América Latina. Perú ofreció su Ejército, Brasil envió aviones. Hasta la Nicaragua sandinista nos apoyó lo mismo que Cuba. Por encima de todo, éramos latinoamericanos. Y este hecho de trascendencia mundial, que reubicaría a la Argentina en el campo del Tercer Mundo, junto a aquellos pueblos que como nosotros luchaban por su independencia nacional, sería objeto de una feroz campaña de desmalvinización que no cede ni un solo día”.

Esta serie de reflexiones desde una posición de un nacionalismo inclusivo como es la que representa el peronismo, nos llaman pensar también como el peronismo ha perdido también el casillero del nacionalismo, a manos de un presidente anarcocapitalista en parte por estos posicionamientos alfonsinistas que han ganado fuerza en nuestro espacio. Es fundamental rever esta problemática de cara a la reorganización del peronismo.