Roberto Salvarezza: “Tenemos que ser siempre ambiciosos, mirar al futuro” 

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20 AÑOS DE KIRCHNERISMO

Roberto Salvarezza: “Tenemos que ser siempre ambiciosos, mirar al futuro” 

24 Mayo 2023

Roberto Salvarezza tiene un camino trazado, no sólo para atrás sino también para adelante. Es una de las pocas personas de la Argentina que pudo mirar la ciencia y la tecnología desde todo punto de vista, incluso de ministro de la Nación. No hay exageración sí se expresa que es uno de los que más sabe de este conjunto de disciplinas y de los métodos y procesos para resolver problemáticas.  

Doctor en Bioquímica, investigador del CONICET, titular de YPF Litio, y de Y-TEC, empresas del estado que exploran este mineral que hasta hizo que hablara la Jefa del Comando Sur de EEUU, Laura Richardson. 

Agencia Paco Urondo:¿El Kirchnerismo torció la historia? Considerando los acontecimientos previos, y para donde se movía el mundo.   

Roberto Salvarezza: Veníamos teniendo en el país ciclos de avance, de gobiernos, donde el Estado se consolida como un actor importante, como un garante del desarrollo y el bienestar de los ciudadanos como fue todo el ciclo de los gobiernos del general Perón y que luego fueron interrumpidos por el golpe de Estado del 55, junto con los continuos vaivenes y los retrocesos que hubo durante toda la etapa de proscripción del peronismo; la llegada de Perón en el gobierno de Cámpora por el 73 y luego la larga etapa de la dictadura militar donde efectivamente comienza un ciclo neoliberal muy importante con una desindustrialización marcada del país y la extranjerización de la economía.

Esto continúa durante toda la etapa posterior, pero, podemos rescatar la época de Alfonsín en alguna medida. El proceso económico y social continuó hasta el 2003, el cual, es un punto de inflexión donde vuelve a aparecer esta idea de un país diferente, que pone las fichas en un desarrollo integral.

APU: ¿Cuáles fueron las primeras reacciones ante el gobierno de Néstor? Recordemos que comenzó con cambios significativos desde los primeros días. 

RS: Desde mi óptica de científico éste era un sector muy golpeado por la crisis del 2001 con una situación que venía desde los ´90. En la etapa de Cavallo el mandar a lavar los platos a los científicos, de alguna manera, acompañaba el proceso de desindustrialización y a el proceso de desmantelamiento de la ciencia y la tecnología nacional. En ese momento perdíamos científicos todos los días. Lo característico era el éxodo, se nos iban los científicos. 

Con la llegada de Néstor se abrió un interrogante. Era poco conocido, con un 25% de votos y con la expectativa de muchos para que hubiera un cambio. Desde la mirada del sector científico, por supuesto, también había muchos interrogantes, pero se fueron despejando porque desde un comienzo hubo una mirada sobre el sistema educativo, sobre el sistema universitario, sobre los salarios de los científicos, y también, sobre mejoras en el CONICET. 

Rápidamente, para el 2005, ya teníamos una clara idea de que este gobierno había cambiado absolutamente la tendencia. Se respetaba la actividad científica, se nos hacía participar por primera vez, éramos convocados al ministerio (Educación), a la Secretaría de Ciencia y Tecnología, donde se empezaban a debatir cuáles eran los ejes del desarrollo científico tecnológico que necesitaba nuestro país. 

Fue una etapa muy motivante que nos involucró a todos. Que sentó las bases y las posibilidades de refundar el sistema de ciencia que estaba realmente al borde del desmantelamiento total. La etapa de Néstor y Cristina fue fundacional para nosotros porque ahí fue cuando comenzaron a pensarse políticas que hicieron retornar a los científicos: casi 1.000 fueron repatriados. 

APU: En 2007, ya con Cristina, se crea el Ministerio de Ciencia y Tecnología.

RS: Fue obviamente una medida que culminó todo lo anterior. Néstor sentó la recuperación de la ciencia. Volver a poner la ciencia en ‘impulsor’ del desarrollo que veníamos teniendo. El país crecía, crecía la producción industrial, crecía la producción agrícola con un agro tecnificado. Argentina crecía y la ciencia estaba presente. Esto fue darle el rango, fue poner simbólicamente a esa ciencia que venía creciendo en el espacio de la toma de decisiones, que empezaba a tener más peso y llegaba, ahora simbólicamente, a tener su ministerio. 

Esto aconteció con la construcción del centro del Polo Científico Tecnológico. A lo que se le dio, también, todo un marco simbólico, junto al CONICET y a la agencia que financiaba. Fueron acciones muy coordinadas. Acciones, que fueron consecuencias de un desarrollo de la recuperación de la ciencia a ponerla en el lugar que le que le correspondía. 

Fue una decisión muy importante de Cristina. Fue algo tan simbólico que muchos de nosotros en ese momento dijimos: ‘Cristina es y va a ser la presidenta de los científicos’.

APU: Desde una mirada histórico, el kirchnerismo tiene grandes indicadores de recuperación en Producción y Trabajo, en Ciencia y Tecnología, sin embargo hay un gran desconocimiento: ¿Por qué crees que sucede? 

RS: Siempre hubo desde los medios una clara tendencia a ocultar los logros de los gobiernos de Néstor y Cristina y sobre todo a restar importancia a ese cambio de rumbo que fue tan significativo. 

Si uno mira los índices de participación de la industria en el PBI de nuestro país, puede notar la tremenda caída que hay a partir de los ´70, a partir de la instalación de la dictadura, y que luego continúa con toda la etapa neoliberal.

Néstor consigue detener esa caída y eso significa que el tema de la industria es el empleo también. Por ejemplo, si bien el campo genera muchas divisas, su participación en la creación del empleo es baja. En la etapa de Macri otro proceso neoliberal vuelve a ocurrir, el mismo proceso desindustrialización de nuestro país. Estos procesos van acompañados siempre desde el desmantelamiento del sistema científico tecnológico porque efectivamente para un país donde el neoliberalismo -que es un neoliberalismo periférico- conduce a una situación neocolonial que experimenta Latinoamérica y África, también. 

El sistema de ciencia que construyeron Néstor y Cristina fue castigado durante la etapa de Macri pero no fue destruido, fue maltratado, se lo desfinanció, se lo desmotivó. Pero, sin embargo, es un sistema resistente. Que ha resistido cambios y vaivenes. Y que tenía capacidad de reacción, con un cambio de gobierno y con una actitud absolutamente diferente. 

APU: ¿Todo lo que el kirchnerismo aportó para financiar la ciencia y la tecnología, digamos, fue palpable durante la pandemia?

RS: Pudimos infundir la motivación que se juntó a esta situación tan especial que hubo en la pandemia, la necesidad de cuidar a los argentinos, de protegernos y de darnos todas las herramientas tecnológicas.

En ese contexto, el sistema de ciencia aportó los test de diagnóstico, los test de anticuerpos, los barbijos con nanotecnología que desarrolló el CONICET, y que se veían en todos lados. Ahí llegó a la sociedad la ciencia Argentina. Porque si bien hemos hecho reactores nucleares, satélites, hemos festejado poner un satélite como si fuera un triunfo en el Mundial de Fútbol la verdad que también esta llegada creo que no la habíamos tenido nunca, no la llegada así... tan amplia, tan masiva.

Fue una gran labor de la ciencia y la ciudadanía lo percibió. Hoy en día las encuestas que uno hace sobre la percepción social que tiene la ciencia, está al tope. Los científicos, los investigadores, están al tope de la valoración social. La ciencia argentina es valorada. Mucho contribuyó la pandemia para volver a reponerla en ese lugar, en un lugar que nunca debió salir porque es un elemento clave para el desarrollo de los pueblos.

Nosotros apenas llegamos al Ministerio promovimos la Ley de Financiamiento de la Ciencia, una ley que pretende dar esta sostenibilidad. Hemos vivido ciclos muy complicados por eso una de las tareas más importantes que nos propusimos en el ministerio de Ciencias, justamente, durante esta etapa 2020/21, fue lograr la promulgación de la Ley de Financiamiento de la Ciencia. Cosa que logramos y qué festejamos. Es una ley muy importante que le tendría que dar sostenibilidad a todo el Sistema de Ciencia y Tecnología del país.

APU: Estamos muy bien en cuanto a ciencia en el mundo, somos reconocidos: ¿Qué tenemos que lograr?

RS: Participé de una reunión de economistas en la Universidad de Quilmes donde se debatía el desarrollo de nuestro país en el contexto mundial. Donde, mostraban una gráfica muy clara donde aparecía la relación que hay entre PBI e inversión en ciencia tecnología e innovación. En los países más desarrollados se puede ver que hay una correlación muy clara y aparte que esa correlación no es un simple ‘tenemos dinero y lo gastamos en ciencia’, sino que es al revés, ‘porque gastamos en ciencia tenemos desarrollo’, y hoy en día lo vivimos: disputamos 5g, disputamos inteligencia artificial, disputamos tierras raras, disputamos litio, semiconductores, disputamos los chips, disputamos biotecnología. En la pandemia fue la disputa de poner la vacuna del país más desarrollado. 

Es una disputa por el conocimiento. Hoy los desarrollos socioeconómicos están vinculados a nuestra capacidad de producir conocimiento y Argentina lo tiene, tiene una matriz de universidades, una matriz de organismos de ciencia muy fuerte. 

Lo que tenemos que lograr, como ocurrió en la pandemia, es que toda la potencia de ese sistema de Ciencias pueda ser aplicada a resolver los problemas que tiene nuestro país y a darle valor agregado a toda nuestra producción. Sí logramos eso seguramente estaremos en el concierto de los países desarrollados y los países soberanos. El conocimiento, hoy, es soberanía. 

APU: ¿Estás preocupado por los discursos de Milei y Bullrich que tienen como eje desfinanciar al Estado?

RS: Estoy preocupado por la ciencia en la medida en que ocurra un cambio de gobierno liderado por estos sectores, que ya han gobernado el país durante la etapa de Macri y que prometen hacer exactamente lo mismo, entre ello, la eliminación del ministerio de Ciencias.

Y también, existen otros ejemplares todavía más a la derecha que prometen la destrucción del Estado.

Es incongruente esta mirada de estos sectores que se identifican con los países desarrollados, con el libre comercio, cuando realmente el mundo desarrollado no hace otra cosa con el Estado que desarrollar la ciencia y la tecnología. Claramente me preocupa, creo que en la medida en que uno vota en una elección presidencial, en la cual se marcan cuatro años de gobierno, vamos a tener memoria los argentinos de las consecuencias de estas políticas. 

APU: Cristina no será candidata…

Respecto de lo que es nuestro espacio político, se van a encontrar los caminos para tener una propuesta competitiva desarrollando un programa que sea coherente y que rescate estas grandes líneas que veníamos esbozando, esas grandes líneas que se trazaron durante los gobiernos de Néstor y Cristina, que son las banderas históricas por las cuales este país ha logrado avances soberanos y avances socioeconómicos que han llevado al bienestar de la mayoría de los argentinos.

La situación de Cristina no es una situación aislada, es el producto de Lawfer, es el producto de toda una estrategia para el continente, para Latinoamérica, que se ha implementado desde afuera y que aquellos que hoy en día han sido defensores de esta Latinoamérica integrada con una propuesta de desarrollo inclusivo, de mayor industrialización, de desarrollo tecnológico, de competitividad; el denominador común de todos estos líderes latinoamericanos que hemos tenido es que les ha valido a todos ellos el Lawfer: desde Evo que le valió un golpe de estado, hasta Lula que terminó en la cárcel y por supuesto a Cristina con esta proscripción. 

APU: ¿Qué reflexión hacés, mirando para atrás y, sobre todo, pensando en lo que se viene? 

RS: Hemos tenido toda una etapa de refundación. He vivido muchos años en el sistema de Ciencias. Soy investigador desde el año ´77 y la verdad que hemos vivido muchas circunstancias. Creo que la etapa en esta crisis nos ha marcado a todos, ha sido un norte. No podemos decir que estamos realizados en ciencia y tecnología porque tenemos que ser siempre ambiciosos, mirar el futuro porque esta Argentina lo necesita. Necesitamos más ciencia, más tecnología para llegar ahí, a ese lugar que queremos de nuestra sociedad, una sociedad inclusiva, una sociedad que pueda desarrollarse plenamente. 

Sabemos el camino y ese camino nos lo mostró, nos lo señaló y nos ayudó Néstor y Cristina y por ahí seguiremos caminando a ver si finalmente concretamos estos sueños que han sido los sueños de muchos científicos de nuestro país y que seguramente serán de los más jóvenes, que nos están acompañando en este camino.