Confederalismo democrático kurdo: ¿cómo afecta a Medio Oriente?

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Confederalismo democrático kurdo: ¿cómo afecta a Medio Oriente?

14 Agosto 2015

Por Guido Luppino

En medio del conflicto que azota la región de Medio Oriente, se avista un proyecto democrático por parte de los kurdos, llamado Confederalismo Democrático.

El territorio reclamado por el pueblo kurdo, Kurdistán, abarca zonas de Turquía, Siria, Irak e Irán. El Kurdistán Sirio, también llamado Rojava, se encuentra en manos de las milicias kurdas desde el año 2012, en el marco de la guerra civil que vive Siria hace cuatro años. A fines de 2013, habitantes de la región, declararon el autogobierno en Rojava.

Una vez declarada la autonomía en el norte de Siria, se creó el Comité Supremo de Kurdistán, integrado por 16 partidos políticos, donde la facción principal es el Partido de la Unión Democrática (PYD), ligado al Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK).

El conflicto

Las Unidades de Protección Popular Kurda (YPG), son el brazo armado oficial del Comité Supremo Kurdo, en el Kurdistán sirio. En el mes de Junio del pasado año, lograron tomar la ciudad siria de Tal Abyad, fronteriza con Turquía, luego de semanas de ofensivas.

La guerra civil siria presenta constantes enfrentamientos entre diversos bandos: el ejército sirio defensor del presidente Bashar Al Assad, los rebeldes que pretenden derrocarlo (Frente Sirio de Liberación), el Estado Islámico (ISIS), Al Nasru (filial de Al Qaeda, ya separada del ISIS), y por último, en el norte del país, las milicias kurdas que defienden el territorio reclamado por ellos.

Con Tal Abyad en sus manos, ciudad fronteriza de relevada importancia ya que funciona como ruta de múltiples suministros, el poderío kurdo se vio vitalizado, reviviendo su idea política de un Confederalismo Democrático, en todo Kurdistán.

El sueño revivido

La toma de Tal Abyad, abrió nuevamente el anhelo histórico de una nación propia, de toda la población kurda. Las aspiraciones de una nación kurda, quedó lejos hace ya casi un siglo. Primeramente ilusionados con los tratados post gran guerra, Sykes-Picot, donde pretendían un suelo propio. Esto pareció ser avalado en 1920 por los tratados de Sevres, donde se aprobaba un territorio político para la construcción de Kurdistán; pero prontamente destrozado fue el sueño kurdo cuando en 1923 se firmaron los acuerdos de Lausana, imponiendo las nuevas fronteras de la Turquía moderna, dejando rota la ilusión.

Hoy en día, el sueño vuelve a verse posible, se demostró ser fuerte militarmente, resistiendo y venciendo el avance del ISIS. Tras el afianzamiento de las YPG en Rojava, se declaró autonomía gubernamental, comenzando a construir el ideal político kurdo, el Confederalismo Democrático.

La concepción teórica

La noción del Confederalismo Democrático proviene del líder kurdo, Abdullah Öcalan, su influencia teórica es rotunda sobre el pueblo kurdo. Öcalan hoy en día se encuentra apresado en Turquía, acusado de terrorismo y separatismo, con una condena de cadena perpetua.

El Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), desde su formación (1978) ha sido de corte marxistas-leninistas, pero con el tiempo y una fuerte corrección de sus errores han virado hacia una concepción más democrática. Desde el 2000 surgieron discusiones sobre qué modelos seguir a la hora de poder realizarse políticamente. Öcalan, desde el encierro, influyó notoriamente, siendo uno de los propulsores de la nueva idea política, que caracterizaron como una “Democracia sin Estado”, haciendo referencia a que las democracias deben gobernar, no así los Estados.

Los mismos kurdos asemejan su concepción política a la del zapatismo del sur mexicano, o con el proceso boliviano del Movimiento Al Socialismo (M.A.S.), liderado por el presidente Evo Morales.

¿De qué se trata el Confederalismo Democrático?

Refiere a una organización civil basada en la democracia, con inclusión religiosa y étnica, ecologismo y feminismo; combinando estos factores para lograr una sociedad justa y en paz.

En Rojava, utilizan las asambleas y consejos como medio para la construcción de su plan político. Existen asambleas callejeras, barriales y de las ciudades, que responden a una asamblea general democrática. La idea es lograr una matriz política a través de comunas, con el fin de otorgar poder al pueblo y participar en las decisiones políticas, económicas, y sociales. El nivel político que le sigue, son los consejos, hasta llegar al Consejo Popular de Rojava. Claro está que las comunidades se forman acorde a los distintos ámbitos de la vida política.

El Confederalismo Democrático está abierto a otros grupos y facciones políticas, se orienta al consenso. Los kurdos apuntan a una política de paz, aunque de igual manera las milicias son claves, ya que el peligro exógeno es inminente. Los Consejos son mixtos, participan mujeres y hombres por igual; también las minorías forman partes de los mismos, por ejemplo los yazadíes (religión de los kurdos antes de la islamización obligatoria) o árabes.

En cuanto a lo económico, se pretende alcanzar una economía social, un socialismo económico, con una impronta local y sobre todo, gestionado por el propio pueblo kurdo. Hoy en día, es complicado por el bloqueo impuesto por Turquía. Es complejo producir en estas condiciones, pero la idea es superar la guerra y poder comenzar a construir su propia economía.

El ecologismo es otro pilar a implementar. Se tomó el principio de la ecología social del estadounidense Murray Bookchin, quien basa su modelo en una producción regional, ecológica y descentralizada.

El feminismo es una de las principales banderas de los kurdos. Se observa a la mujer en un papel que rompe con las líneas patriarcales mundiales, sobre todo en Medio Oriente. La mujer combate al igual que los hombres, es parte de las milicias, de los altos mandos, y de hecho tienen tropas autónomas. Mundialmente se apreció el fuerte papel de la mujer en la resistencia kurda contra la invasión yihadista en la ciudad de Kobane, hoy en día en manos de los kurdos.

Futuro

Podemos observar la idea de una Nación democrática e inclusiva en Rojava, lo cual contrasta con los gobiernos, ya sean reconocidos o no internacionalmente, de la región. Pero es difícil presuponer como seguirá la situación en el Kurdistán sirio. Si bien el sueño del Confederalismo Democrático hoy parece cercano, la realidad regional atenta contra el mismo.

Turquía acaba de anunciar el comienzo de una ofensiva contra el ISIS en territorio sirio, pero sobran los motivos para suponer que su principal objetivo sigue siendo el pueblo kurdo. Claro, deben de argumentar que los ataques son dirigidos contra el terrorismo islámico, pero por lo pronto fueron más los objetivos kurdos dañados que los yihadistas. Son muchos factores los que irán definiendo el avance político en Rojava, y a eso tendremos que prestarle atención.