Partido Obrero: entre la miopía y el sectarismo
Por Juan Ciucci
En estos días se conoció un texto del dirigente Néstor Pitrola en el órgano oficial del Partido Obrero titulado "El PTS se desplaza del FIT a un frente con el kirchnerismo". No es nueva esta pelea al interior del Frente de Izquierda y de los Trabajadores.
Pero esta vez tiene la peculiar intención de justificar la inexplicable ausencia del PO en el acto en Plaza de Mayo de rechazo a la ilegítima detención de la dirigente de la Tupac Amaru, Milagro Sala. Allí se pudo ver a las organizaciones kirchneristas junto a la casi totalidad del campo de izquierdas de nuestro país: PTS, MAS, IS, PSTU, Convergencia Socialista, AyL, MST, etc.
Los argumentos de Pitrola rozan en la justificación de la detención de Sala, a quien apoda la “Aníbal” jujeña, y a la que caracteriza como “emblema de la corruptela, de la cooptación y el matonismo que sufrió todo el movimiento popular en Jujuy”. Los mismos argumentos que Morales esgrime para una detención arbitraria, que debe alertar a todo el campo popular de la avanzada reaccionaria que busca criminalizar la protesta social.
La respuesta del PTS no se hizo esperar, y allí le marcan varias “incongruencias” que el PO ha cometido, y no deja de cometer, en su historia. Por caso, su recordada participación “con el "ingeniero" Blumberg en 2006 en manifestaciones que solicitaban mano dura y fortalecimiento del aparato represivo”. Al mismo tiempo, se distancian del kirchnerismo y explican la “unidad de acción” que se pudo ver en Plaza de Mayo.
En tiempos en que cada día queda más claro que Macri y Scioli no eran ni son lo mismo, algo que el FIT debe responder ante cada votante que siguió su lineamiento del voto en blanco, ver en un mismo reclamo al peronismo y a la izquierda significa un avance en la lucha popular. Entender que pese a las diferencias, se tiene un enemigo común al que hay que enfrentar. No son tiempos de sectarismo cuando el macrismo avanza a puro decreto contra los derechos del Pueblo.