"Somos enemigos de las políticas que está tomando este Gobierno"
Por Enrique de la Calle
Según los organizadores del acto, más de 250 mil personas participaron de la convocatoria realizada por las cinco centrales sindicales: las tres CGT y las dos CTA. Cuestionaron duramente al Gobierno de Mauricio Macri y pidieron por la ley antidespidos. Sobre el cierre, Hugo Moyano afirmó que "no somos enemigos del Gobierno, pero sí de las políticas que están tomando". Y aclaró: "Para defender a los trabajadores vamos a estar en la calle, luchando".
Todos los oradores destacaron que el acto fue "histórico" ya que involucró a todas las centrales obreras, lo que no ocurría en muchos años. "Acá comienza una nueva etapa para el movimiento obrero", aseguró Hugo Yasky, de la CTA. El dirigente pidió a Diputados que aprueben la ley de "emergencia ocupacional" que tiene media sanción de Senadores. "Si Macri la veta estaría cometiendo un gran error, vamos a luchar en la calle contra los despidos", advirtió.
El primero en hablar fue Pablo Micheli, de la CTA Autónoma. "Este es un acto en defenda propia, queremos ser escuchados, si eso no pasa vamos a luchar, con dignidad y en unidad", afirmó. Después, Antonio Caló, de la UOM, se refirió a los despidos: "Ya lo vivimos en los 90, que te echen es lo que peor que le puede pasar a una familia. No lo vamos a permitir", dijo.
El último orador fue el camionero Moyano. En su discurso agradeció la presencia de los diferentes sectores ("también están acá las organizaciones sociales"). "Los dirigentes entendimos que antes que nosotros están los intereses de los trabajadores", aclaró. También pidió por la ley antidespidos y le propuso a Macri que "tome medidas para los trabajadores, hasta acá se tomaron medidas para un solo sector". "El presidente tiene que dejar de escuchar a los técnicos que le hablan de números. Los trabajadores no somos un número más. Somos quienes producimos la riqueza del país", afirmó.
Moyano se refirió a la cobertura mediática previa al acto y aclaró: "No le tienen que tener miedo a los trabajadores. Nosotros queremos que nos respeten y nos escuchen, solo eso". Sobre el final aseveró que el acto no era "contra el presidente": "No somos enemigos del Gobierno, somos enemigos de las políticas que están tomando". Recibió una ovación de la multitud como respuesta.