Bahía Blanca: la Justicia autorizó otro “descanso” de Massot en el exterior
Por Diego Kenis
El empresario Vicente Massot podrá en breve salir del país y disfrutar de una quincena de “descanso” europeo en la ciudad de Frankfurt, en el sudoeste de Alemania, pese a encontrarse imputado en una causa por delitos de lesa humanidad sobre cuyo futuro deberá expedirse la Corte Suprema, tras agotarse todas las instancias inferiores.
Tío del actual titular de la bancada oficialista en Diputados y aparente ex dueño del grupo mediático La Nueva Provincia, Massot está acusado desde 2013 por los secuestros y homicidios de los obreros gráficos y delegados sindicales Enrique Heinrich y Miguel Ángel Loyola, ocurridos en 1976 y a escasos meses de que ambos encabezaran una prolongada disputa gremial con la patronal.
En paralelo, se le imputa haber formado parte de la cúpula directiva del diario La Nueva Provincia que durante el terrorismo de Estado implementó una campaña de acción psicológica que el Tribunal Oral Federal bahiense ya consideró “comprobada” y “destinada no sólo a imponer la versión de los victimarios, sino principalmente a colaborar en la creación de un estado tal de anomia legal en la sociedad, que permitió el ejercicio brutal de violencia irracional y desatada por parte de la estructura estatal”.
La decisión de autorizar el viaje europeo de Massot fue suscripta a última hora del viernes 12 por el juez federal de Bahía Blanca Walter López Da Silva. Recién llegado a la jurisdicción, los más recientes antecedentes de López Da Silva se vinculan con el otorgamiento de domiciliarias en serie a represores, sobre la base de un párrafo del fallo de la Corte sobre el 2x1: aquel que pretende asimilar las condiciones de detención de genocidas con los secuestros, torturas y homicidios que ellos descargaron sobre sus víctimas.
En el caso de Massot, López Da Silva descartó sin mayores argumentaciones las objeciones de los fiscales Miguel Palazzani y José Nebbia, que subrayaron la responsabilidad del Estado argentino ante la comunidad internacional por el tenor de los crímenes imputados y opinaron que podía existir riesgo de fuga del empresario nacido en Manila, Filipinas.
Al desestimar el temor de los fiscales por una eventual fuga, López Da Silva pasó por alto uno de los momentos televisivos de la semana: en la mañana del mismo viernes 12, el director del diario La Nación, Bartolomé Mitre, confesó que junto al CEO del Grupo Clarín Héctor Magnetto huyeron una noche a Uruguay, temiendo ser detenidos en una causa de lesa humanidad. Las similitudes con el caso de Massot son ostensibles, a punto tal que él mismo escribió como columnista en el diario de la familia Mitre, con el que compartía la pertenencia a cúpulas directivas de entidades empresarias y una misma línea editorial en lo referente al terrorismo de Estado.
Los principales argumentos del juez para interrumpir la única medida restrictiva de la libertad impuesta a Massot se basaron en los antecedentes previos de otorgamientos de beneficios similares y en un párrafo de la propia defensa del imputado, que señaló “las numerosas salidas del país que registra Massot en los cuatro años previos a la iniciación de esta causa, hecho objetivo que demuestra que los viajes al exterior forman parte de la actividad empresarial del imputado y de sus hábitos personales”.