Brasil: “El hambre está volviendo”
Por Santiago Gómez
Desde Florianópolis - Brasil
Gleisi Hoffmann es senadora por la provincia de Paraná, de la cual Curitiba es capital, y fue donde pudimos conversar con ella cuando fue a dar su apoyo al ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva el día que fue citado por el juez Sérgio Moro para declarar en el marco de la operación Lava Jato. Hoffmann estuvo entre quienes acompañaron al ex presidente hasta el juzgado como forma de darle un mensaje al tribunal y la policía. Próxima presidenta del Partido dos Trabalhadores, la senadora señala que no podría haber llegado donde llegó sin la políticas de género dentro del partido. Analiza el presente de Brasil, la responsabilidad del PT para llevar a Lula al gobierno y el riesgo de estallido social.
Mientras la militancia de izquierda brasilera se ocupó de asociar a Curitiba a la derecha, a los "coxinhas", como llaman en Brasil a lo que en Argentina dirían gorilas, la senadora de Paraná cuando subió al escenario se ocupó de recordar que Curitiba fue la primer ciudad en la que se hizo un acto del colectivo Direitas Já! que pedía en inicio de los ochenta por la vuelta de la democracia en el país. Hoffmann fue la elegida de Lula para estar al frente del PT, luego de la conducción del partido por Rui Falcão, cuando el partido más se alejó de las bases, los sindicatos y los movimientos sociales.
Hoffmann disputará todavía una elección con el senador por Río de Janeiro Luiz Lindbergh Farias Filho, que antes de incorporarse al PT pasó por el Partido Comunista de Brasil, por el trotskismo, y encarna un discurso más radicalizado, las voces más duras dentro del partido que proponen el "Muda PT" (Cambia PT), caracterizando que el problema que el país vive se debe a la derechización partidaria por el pragmatismo de gobernar. En este contexto y antes de que Hoffmann subiera al escenario, tuvimos la oportunidad de conversar con ella en Curitiba.
APU: ¿Cuál va a ser el mayor desafío de usted al frente del PT?
Gleisi Hoffmann: Preparar la campaña para Lula ser nuevamente el presidente de Brasil, ese es nuestro principal objetivo, hasta porque es un compromiso que tenemos con el país, no podemos mirar el país como está, con el Estado derecho siendo desmontando, sacando los derechos de las personas y no hacer nada. La forma que tenemos para colaborar con el país para recuperar el crecimiento económico, ayudar a las personas es Lula en el gobierno.
APU: Durante la campaña previa del partido persistió el debate “Cambia PT” ¿Qué tiene que cambiar?
GH: Hay algunos que están con eso, que sería hacer una reflexión más crítica del pasado. El partido entero tiene que cambiar, recuperar la relación con las calles, con los movimientos sociales, tener un funcionamiento más horizontal, construir un programa más avanzado para el próximo gobierno de Lula.
Tuvimos errores, pero errores en la política no es cosa de autoflajelarse, errores en la política es una cuestión de evaluaciones, vos tenés transformar tus errores en acción política renovadora, eso es lo que estamos haciendo.
APU: ¿Cuál es la mayor dificultad para las mujeres en el partido?
GH: El PT es uno de los partidos que más espacio da a las mujeres. Yo siempre digo que soy fruto de la política de cupos del PT, yo no sería senadora, no estaría en la dirección partidaria, ni habría sido postulada para presidenta del partido si yo no hubiera una oportunidad de hacer mi militancia en cargos dirigentes. Eso es algo muy difícil para las mujeres en la política y el PT abrió esa puerta, por nosotros tenemos el mayor número de mujeres en la política.
Es claro que todavía hay una visión machista, la política es masculina y el PT también tiene una postura más masculina, códigos masculinos, por eso peleamos mucho para tener variedad, igualdad en la composición de las direcciones partidarias, en las candidaturas, es una lucha constante.
APU: Hace pocas semanas Guilherme Boulos escribió una columna en la que afirmó que si Michel Temer no entiende el mensaje que las calles le están dando el país se va a prender fuego ¿Cree que será así?
GH: Creo que caminamos por una confusión social, el pueblo brasilero conquistó muchos derechos en los últimos años, el hambre es una situación que no tenías más en Brasil, una realidad que no era más nuestra, pero está empezando a volver. Vamos a tener otra vez hambre, saqueos en el nordeste, vamos a tener problemas en el interior por el desmonte de la agricultura familiar, todo eso va a genera, sin lugar a dudas, mucha revuelta en la población.
Ellos no saben lidiar con el pueblo, no tienen muñeca para eso, creo que corremos mucho riesgo por eso.