Nehuen Rodríguez: una condena insuficiente que no desanima a la organización popular
Por Santiago Asorey
El Tribunal Oral Criminal N° 4 impuso una sentencia insuficiente contra el uniformado que atropelló con un patrullero al joven Nehuen Rodríguez (18), en diciembre del 2014, en el cruce de Brandsen y la Avenida Ramón Carrillo, Barracas. Daniel Castagnasso recibió una pena de tres años de prisión en suspenso y 6 años de inhabilitación para conducir cualquier vehículo por el homicidio culposo del joven del barrio de la Boca.
La resolución necesita contextualizarse en el auge de “la doctrina Chocobar” , en el cual se ven las presiones sobre un Poder Judicial permeable a los lineamientos del Poder Ejecutivo y el aval del Estado de excepción sostenido por agentes policiales que justifican muertes porque ocurren en supuestos “cumplimientos del deber”. En este marco, el agente fue condenado en suspenso, por ende no pasará un solo día en la cárcel.
Durante el macrismo, ya existía un antecedente muy grave en materia de crímenes policiales que también terminó con el policía en su casa. El 27 de junio del 2017, los jueces Gustavo González Ferrari, María Cristina Bertola e Inés Cantisani del Tribunal Oral en lo Criminal N°16 emitieron un vergonzoso fallo que absolvió al ex agente de la Federal, Santiago Veyga, por el asesinato de los jóvenes Jonathan “Kiki” Lezcano y Ezequiel Blanco.
Ayer, al terminar la lectura del veredicto, Roxana Cainzos, madre de Nehuen, volvió a expresar lo que siempre afirmó. “Desde un principio supe que la justicia que iba a tener era social, con ustedes compañeros”, explicó Roxana ante los militantes, familiares y vecinos del barrio de la Boca. Roxana habló siempre de lograr la “condena social” y a partir de esa base aglutinó a más de una decena de espacios populares en la búsqueda de justicia. A la salida de tribunales Roxana fue recibida por el canto militante: amigos, vecinos y jóvenes del barrio dejaban bien en claro: “Todos somos Nehuen Rodríguez, buscamos justicia. Queremos que se haga cargo la policía”.
El caso de Nehuen es un emblema de cómo las organizaciones populares barriales se reafirman y unifican para pedir justicia por un crimen contra uno de los hijos del barrio. Las audiencias fueron acompañadas por organizaciones, familiares de Nehuen y medios de comunicaciones populares que sostuvieron jornadas de radio abierta. Las organizaciones del pueblo estuvieron despiertas, atentas, exigiendo justicia. El barrio organizado sabe que pasa con las investigaciones de los pibes asesinados por la policía si no están presentes en las puertas del Palacio de Tribunales. En este contexto participaron del colectivo de medios de comunicaciones populares que cubrieron las jornadas, los espacios FM La Caterva, FM Riachuelo, Radio Gráfica, La Retaguardia, Agencia Paco Urondo, Sur Capitalino, La Obrera Colectivo Fotográfico, FotoSur. Además, se sumaron a las jornadas un amplio espectro de organizaciones que incluyeron espacios peronistas, kirchneristas, de izquierda, troskistas, organizaciones barriales, centros culturales, estudiantes. Entre ellas: se destacan el Centro Cultural Miguel Miranda, La Cámpora La Boca, el MP La Dignidad, el Frente Popular Darío Santillán, la Comisión de Amigos y Familiares de “Darío Santillán”, la Secretaría de Derechos Humanos de la CTEP, La Boca Resiste y Propone, la Campaña Nacional contra la Violencia Institucional, CORREPI, La Garganta Poderosa, PTS Barracas y Partido Obrero La Boca, entre otros espacios.
En su resolución Báez ordenó la apertura de una investigación por falso testimonio contra el acompañante de Castagnasso en el patrullero policial, el agente José Daniel Soria Barba. Asimismo, también el magistrado pidió que se investigue el accionar de los uniformados en los peritajes iniciales de la investigación. La lucha seguirá en la justicia, pero también en la calle. Es nuestra responsabilidad seguir sosteniendola.