Amorim: “Firmé pidiendo el cancelamiento de las deudas de América Latina con el FMI”
Por Santiago Gómez
Desde San Pablo
El gobierno de Donald Trump sostiene la narrativa de que la pandemia que estamos viviendo es culpa de la falta de libertad de información en China, por eso le avisó tarde al mundo. El gobierno Trump comenzó a hablar de “vírus chino” o “vírus de Wohan” y el Ministerio de Relaciones Internacionales de China le respondió que los estadounidenses están alimentando la xenofobia contra el pueblo asiático. El diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente, publicó en las redes que estamos viviendo una nueva Chernobyl y que como la Unión Soviética China está ocultando información. La Embajada china en Brasil le respondió que durante su viaje a Miami se contagió el “virus mental”. Líderes de América del Sur pidieron que se cancelen las deudas de los países de la región con el FMI. Entrevistamos a Celso Amorim para conversar sobre estos asuntos.
AGENCIA PACO URONDO: Estados Unidos comenzó con una narrativa de guerra, que varios países repitieron, diciendo que están en guerra contra un enemigo invisible. El mundo entero está hablando de una guerra. ¿Estamos viviendo una guerra?
CELSO AMORIM: Es un término excepcional, si hablamos de pandemia la gran mayoría de la población va a decir “pero ya tuvimos otras, la H1N1, el ébola, y cree que la mayoría de la humanidad sobrevivirá. Creo que cuando el presidente Macron, que fue el primero en hablar de una guerra, habla de una guerra es para traer conciencia a las personas que el nivel de destrucción es un nivel de destrucción equivalente al de una guerra y que la intensidad de las medidas también tienen que ser semejantes a las de una guerra. Claro que una cosa de esas tiene riesgos respecto a las libertades individuales, los derechos humanos, entonces tenemos que prestar atención en cómo se realiza.
Por otro lado, sí, es preciso tomar actitudes como una cuarentena, una cuarentena forzada en algunos lugares, que son muy excepcionales. Nosotros tuvimos la H1N1, la gripe aviar, el ébola fue más localizado, pero ninguna implicó una cuarentena. Estoy en Río de Janeiro, miro por la ventana y hay poca gente en la avenida Atlántica. Hay una inducción a no salir de casa, pero tal vez sea preciso más que esto. Es necesario que todas las personas se concienticen, es una lucha absoluta, porque se trata sólo de que las personas se protejan individualmente, es una cuestión de que con tu comportamiento podés contribuir a la protección de la sociedad como un todo.
APU: Álvaro García Linera, Rafael Correa, Gustavo Petro, entre otras personas, pidieron en una carta que se cancelen las deudas de los países de la región con el FMI. ¿Qué piensa al respecto?
CA: También firmé, estuve de acuerdo en apoyar. Creo que vamos a tener que hacer un examen serio en el futuro en relación al sistema económico, las desigualdades, porque esto nos dificulta lidiar con problemas de salud pública. Tal vez eso no impida que surjan otras pandemias, pero tal vez nosotros estemos más capacitados para actuar. Lo que está asustado mucho, hasta en los Estados Unidos, pero seguro en Brasil y otros lugares, es la falta de test, la falta de dinero para test, la falta de camas, cosas que se resolverían si hubiera un presupuesto mayor. Tal vez no resuelva en un todo, pero estaría más minimizadas las cosas si tuviésemos presupuestos adecuados para salud, cobertura universal, que Brasil tiene, el Sistema Único de Salud, pero cuenta con pocos recursos.
Todo esto nos va a obligar a relativizar la cuestión de la deuda, creo que en un momento como este nadie puede querer ganar o arrancar dinero de países que están con muchas dificultades para lidiar con el problema. Como mínimo, tendrían que hacer una moratoria por un tiempo grande. Pero creo que el cancelamiento es mejor.
APU: ¿Podemos pensar que así como después de la segunda grande guerra podría suceder un nuevo ordenamiento financiero en esta situación?
CA: Todo tiene que ser acompañado con tranquilidad pero con seriedad. Creo que tenemos que enfrentar la cuestión de salud. Una cosa que me preocupa mucho y que no ha sido comentada, claro que ahora en la parte de emergencia no sé si funcionará, pero es necesario aprender a organizar el papel de la cooperación internacional y de la Organización Mundial de la Salud. Creo que a lo largo de los años en vez de que hubiera un fortalecimiento de la cooperación internacional, fortalecimiento de la OMS, sucedió lo contrario.
Acompañé de cerca, porque participé de un panel con el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, sobre el ébola. Me acuerdo de varias recomendaciones, algunas específicas sobre el ébola, la búsqueda de una vacuna, el fortalecimiento de los sistemas de salud en todos los países. Nosotros no vimos todavía lo que puede ser el efecto en los países en desarrollo como los nuestros o África, no sé cómo será.
Sobretodo se hablaba del refuerzo presupuestario de la OMS, que en aquella época era época de Obama, y ya venía disminuyendo porque los Estados Unidos, principalmente, daban cada vez menos dinero. Era necesario reforzar la OMS, era necesario reforzar los sistemas de alerta, de cooperación internacioal, pero creo que eso no sucedió. Esa es una cosa también importante.
No vamos a conseguir resolver este problema sin una gran cooperación. Dentro de los países, por ejemplo, es fundamental que exista entre estados, municipios, gobierno nacional, eso no tiene nada que ver con ideología. Y también tiene que haber una cooperación internacional muy grande, por ejemplo, que haya habido una reunión entre los países sudamericanos, pero es un absurdo que no hayan convocado al gobierno que controla Venezuela, no voy a entrar en la cuestión de mérito. ¿No te gusta el gobierno? Llamalo de facto, llamalo de lo que quieras, pero es él el que puede cooperar. Necesitás cooperar, intercambiar información, con quién sino la voy a intercambiar. ¿Con Guaidó? No, tenés que intercambiar información con el ministro de salud de Maduro.
Es necesario entender que la cooperación internacional, la cooperación dentro de un país, en una situación como esta, está por encima de cualquier ideología. Después vamos a discutir sobre cuál es el programa económica, si va a ser más esto o aquello, claro que tengo mis ideas, pero la cooperación internacional es fundamental para vencer la pandemia. Brasil es el país con el mayor comercio con China en América Latina, tendría todo para en una situación en que necesitase ayuda china, inclusive con equipamientos, con productos necesarios, ser el país con el mayor intercambio. Acá lo que sucede es lo contrario, actuamos contra. ¿Por qué?
Porque el defecto principal de esto, el otro vírus, es el vírus de una ideología fanatizada. Usted tiene derecho de preferir un gobierno o preferir otro, pero lo que no puede de forma alguna es romper la cooperación internacional. Nosotros estamos viendo a China cooperando con Italia, con Alemania, y Brasil se está privando de esa cooperación. A largo plazo tendremos que fortalecer a la OMS, pero como dijo Lord Keynes, vamos a ver si estaremos vivos en el largo plazo.
APU: ¿Que piensa de la narrativa de Trump respecto a que el mundo está viviendo las consecuencias de la falta de libertad en China?
CA: Creo que es una bobada decir que fue por falta de información en China. China tenía todo el interés, lo contuvieron. Hicieron el trabajo, si hubo una falla en el sistema médico, eso puede pasar en cualquier lugar del mundo, pero creo que es totalmente falso e ideológico atribuirle esto al sistema chino, que inclusive consiguió reaccionar con rapidez. Infelizmente, un país que también amo, como Italia, tiene un número de muertos mayor que China, e Italia recibió ayuda china, como está recibiendo Alemania. Creo que ese discurso es una cosa falsa, mentirosa, y que no nos coloca en el camino de resolver el problema.
APU: Quisiera consultarle un aspecto histórico. ¿Es la primera vez que los países del mundo cierran así sus fronteras, como Brasil o Argentina?
CA: No sé como fueron las fronteras durante la segunda guerra mundial, porque nunca leí profundamente sobre el asunto, pero creo que no hubo cierre de fronteras aquí en la región. Es una situación excepcional entonces los países o están sabiendo muy bien cómo lidiar, creo que la primera reacción es esa. Es claro que en el mediano y largo plazo esta no es la solución, porque vamos a tener que cooperar, van a tener que cooperar equipos médicos, eventualmente con vacunas o con algún medicamento, porque vamos a tener que tener una actitud humanitaria respecto a los otros países.
Infelizmente, en América del Sur teníamos una institución muy preparada, claro que no para lidiar con una emergencia como esta, pero sí para ayudar en la cooperación que era el Instituto Sudamericano de Governanza en Salud, que dependía de UNASUR. Todo destruido por esa saña ideológica, que infelizmente continua reinando a pesar de esa amenaza mayor para toda la humanidad. Veo que los países europeos son mucho más maduros en eso y están aceptando ayuda. Nadie está preguntando se la ayuda que vino de China contamina con el virus del comunismo, están allá ayudando, intentando salvar vidas.
Para terminar, dejame mandarle un abrazo y felicitar a Alberto Fernández por la respuesta argentina ante esta pandemia.