El gobierno nicaragüense expulsó al embajador norteamericano
El gobierno de Nicaragua, presidido por Daniel Ortega, decidió expulsar a Hugo Rodríguez, postulado por Estados Unidos para ocupar la embajada en el país centroamericano, a raíz de "declaraciones injerencistas e irrespetuosas" durante su audiencia de confirmación con el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, según afirma el comunicado difundido. A partir de ello, en uso de sus facultades, en el día de ayer retiró el beneplácito concedido en un primer momento. "No puede involucrarse en temas nacionales o ser factor de injerencia o intervencionismo en los asuntos internos de nuestro país", finaliza la nota.
A continuación, el comunicado completo, firmado por Denis Moncada Colindres, ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua, y dirigida a Anthony Blinken, secretario del Departamento de Estado del gobierno estadounidense:
El día de hoy, 28 de julio, 2022, el Señor Hugo Rodríguez, postulante al cargo de Embajador de Estados Unidos de Norteamérica ante el Pueblo y Gobierno de la República de Nicaragua, en audiencia de confirmación del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, realizó declaraciones injerencistas e irrespetuosas en contra de nuestro país, desconociendo los principios del Derecho Internacional, la Carta de las Naciones Unidas y la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.
El Gobierno de Nicaragua, en uso de sus facultades y en ejercicio de su Soberanía Nacional, retira inmediatamente el beneplácito concedido al postulante Hugo Rodríguez.
Reiteramos que todo diplomático tiene el deber de contribuir al respeto y al entendimiento entre los Pueblos y los Gobiernos, es decir, entre la Comunidad Humana. Recordamos que en función de la diplomacia y en cumplimiento de los postulados de la Convención de Viena, no puede el Embajador o Postulante a Embajador, Hugo Rodríguez, involucrarse en temas nacionales que son propios de las y los nicaragüenses y mucho menos irrespetar, ofender, humillar, amenazar, protagonizar o ser factor de injerencia o intervencionismo en los asuntos internos de nuestro país.