Memorias de la violencia antiperonista

  • Imagen
    Aniversario de los fusilamientos de José León Suárez

Memorias de la violencia antiperonista

31 Agosto 2022

Lo mejor que puede hacer un pueblo es tener memoria. A ver, recordemos: 

1-

La Junta Consultiva Nacional fue, en la Argentina, un organismo de la dictadura autodenominada Revolución Libertadora (1955-1958), creado el 28 de octubre de 1955 y puesto en funcionamiento el 11 de noviembre del mismo año. La Junta Consultiva debía ser presidida por Isaac Rojas, el Vicepresidente de facto, y estaba integrada por políticos designados por partidos políticos políticos opositores: Unión Cívica Radical, Partido Socialista, Partido Demócrata Nacional, Partido Demócrata Progresista, Partido Demócrata Cristiano y Unión Federal; seleccionados por el poder militar, de acuerdo a una proporción también establecida por los dictadores, es decir ellos mismos.

Básicamente –que casualidad- excluidos de la Junta Consultiva Nacional el Partido Peronista y el Partido Comunista. Su función terminó siendo la de perseguir peronistas y avalar los crímenes.

2-

Decreto Ley 4161 del 5 de marzo de 1956, fue un decreto ley sancionado por el general Pedro Eugenio Aramburu, presidente de facto, junto al vicepresidente Rojas y todos los ministros de la dictadura autodenominada Revolución Libertadora, que prohibía pronunciar los nombres de Juan Domingo Perón y Eva Duarte de Perón, así como cualquier mención referida a la ideología peronista o que propagandeara al peronismo (recordemos esta frase).

Formó parte de la política llamada de "desperonización" de la población argentina.

3.

Entre el 9 y el 12 de junio de ese año asesinaron y fusilaron 31 compañeros, persiguieron, encarcelaron, torturaron, encarcelaron y asesinaron miles de compañeros peronistas.

Imagen
"Porque no somos “gente”, somos PUEBLO y cuando los pueblos se cansan hacen tronar el escarmiento"

4.

No conformes, el 14 de marzo de 1960 el gobierno de Arturo Frondizi puso en marcha el Plan Conintes (Conmoción Interna del Estado) dando lugar a una ola de allanamientos y arrestos en todo el país. El objetivo era terminar con la conflictividad obrera peronista que obstaculizaba sus planes de gobierno y para concretarlo acudió a las Fuerzas Armadas, se permitió la aplicación de las penas previstas por el Código de Justicia Militar, entre ellas, el juicio sumario (fusilamiento de los acusados). Destinada por supuesto al peronismo, a la clase obrera.

5-

Aun así, el 10 de abril de 1963, mediante el decreto-ley  2713/63, un presidente trucho, marioneta de los militares argentinos, José María Guido, recontra prohíbe al peronismo que ya estaba prohibido desde el año 1956 (de 4161), pero agregando un párrafo esencial: …aunque no se propagandeara al peronismo.

Es decir, no se lo podía siquiera nombrar.

6-

Les siguieron los estatutos de las dictaduras cívico militares que continuaron la tarea de sus antecesores: pretender hacer desaparecer al peronismo....

Lo único que hicieron desaparecer fue a 30.000 compañeros.

7-

Ahora aparecen con la guerra de leyes lo único que han conseguido es unirnos, juntarnos, sacar nuestro peronismo a las calles, a las plazas, a los pueblos, a las ciudades, al país.

Porque no somos “gente”, somos PUEBLO y cuando los pueblos se cansan hacen tronar el escarmiento.

Los dirigentes se están poniendo a la cabeza, mejor. Pero los militantes no debemos dar ni un paso atrás, gritamos basta, como en otras épocas les gritábamos NO PASARÁN.

Y si Larreta, el patrón de la inmobiliaria de CABA, cree que puede parar esto con unas vallas de mierda que equivocado está. No recuerda que ni levantando los puentes del Riachuelo nos pudieron parar. Todavía el pueblo espera porque indujo al suicidio al Dr. Favaloro al no responder sus notas, y nadie presento demanda penal por ello..

Si el domador de reposeras, espía de familiares, opositores y familias de fallecidos en un submarino, la “piba”, y todo Juntos por el cambio con los medios a su disposición creen poder judicializar las funciones del gobierno, todavía no reconocen ni su propia historia reciente

Parafraseando a Eduardo Galeano, El sistema quiso castrarnos a los peronistas, pero somos los más fecundos; quiso callarnos, y somos los más decidores; fracasaron quienes prohibieron el agua porque no pudieron, porque nadie puede, prohibir la sed.

El peronismo no se aprende ni se proclama, se comprende y se siente, ha dicho Perón. Por eso es convicción y es fe. Es convicción porque nace y se nutre en el análisis de los hechos, en la razón de sus causas y de sus consecuencias. Tiene el empuje y la dinámica de la historia en marcha. Es la conciencia hecha justicia que reclama la humanidad de nuestros días. Es trabajo, es sacrificio y es amor, amor al prójimo. Es la fe popular hecha partido en torno a una causa de esperanza de esperanza que faltaba en la Patria y que hoy proclama el pueblo en mil voces distintas en procura de una libertad efectiva nunca alcanzada, a pesar del dolor y del esfuerzo de este glorioso pueblo de descamisados”, escribió Eva.