"El FBI que proponía el gobierno fracasó porque Patricia Bullrich mostró a la Policía Federal cuidando las canchas de fútbol"
Por José Cornejo Pérez. Desgrabación de Ana Mársico. Imágenes de Analía Garelli.
Agencia Paco Urondo: El gobierno actual vino con un discurso de combatir los delitos y el narcotráfico. Hasta habló que la ministra Patricia Bullrich iba a ser candidata a vicepresidenta de Mauricio Macri. ¿Tiene algún balance de seguridad del macrismo?
Gabriel Fuks: Por el fracaso socioeconómico no le quedó otra que volver a hablar de la seguridad para recuperar el núcleo duro del votante del macrismo. El balance general de las políticas de seguridad es de un fracaso absoluto.
APU: ¿Qué rescata?
GF: Lo más importante que se hizo fue el traspaso de parte de la Policía Federal a la Ciudad. Ahora hay una Policía de la Ciudad que posee normas nuevas, que va a quedar, y que vamos a heredar y aceptar. Esto es algo que quedó para el futuro. La Ley 5688 es la que crea esta Policía, que fue votada por el conjunto de las fuerzas políticas, a excepción del FIT. Ahora lo que vemos es que no la cumplen en su totalidad. Por otro lado, la Policía Federal no logró asumir readecuarse y mejorar su institucionalidad. El gobierno dijo que iba a construir un gran FBI argentino. Vos tenés ya cuatro fuerzas: Gendarmería que tiene un rol definido de cuidar la frontera, la Prefectura que tiene un rol claro de los ríos y nivel marítimo vinculado a sectores fluviales, la Policía Aeronáutica que tiene un rol claro en los aeropuertos, y la Policía Federal que debería ser una Agencia de Seguridad de apoyo a distintas cuestiones pero desvinculada de cuestiones locales. En Brasil también hay un modelo como el de EEUU. El FBI que proponía el gobierno fracasó porque Patricia Bullrich mostró a la Policía Federal cuidando las canchas de fútbol. Tampoco es que la Policía anterior era mejor. Hay más control y eso debería conducir a menor corrupción.
APU: ¿En qué no está de acuerdo?
GF: El traslado de 20 mil agentes es un fracaso. Porque el objetivo de todo esto era hacer un FBI. Debería ser instrumento de la justicia federal. Además se hizo una falsa persecución del narcotráfico. Acá quiero hacer una diferencia. El narcomenudeo sí fue perseguido, pero eso no es la guerra contra el narcotráfico. Son cosas muy distintas. Las luchas contra las drogas tienen otros elementos que no son políticas activas de persecusión, sino que incluyen la prevención. En cualquier cosa, las mafias están en otro lugar.
APU: ¿El gobierno fracasó en sus propios objetivos?
GF: Absolutamente, nunca tuvo objetivos claros.
APU: ¿Qué opina de la doctrina Chocobar?
GF: La doctrina Chocobar en verdad no existe, lo que sí existe es la doctrina Bullrich. Lo que busca en verdad Patricia Bullrich es legalizar del abuso de las fuerzas. Lo que por supuesto la ley no permite. Le hicieron creer a la policía que la contención verbal que ella ha realizado con el corrimiento de verdad, es lo real. Entonces le miente a la sociedad y a la policía. La ley a es la ley. La persona que le pega en el pecho una patada a un hombre, sea en el estado en el que esté, y lo mata producto del choque de la cabeza contra el pavimento, deberá ser juzgado. Chocobar va a ser juzgado a partir de febrero del año que viene, y la ministra de Seguridad se va a ir en diciembre del 2019. Cuando “los Chocobar” dejen de recorrer los tribunales, Bullrich solo va a ser un olvido. La doctrina Bullrich fue un supuesto empoderamiento de las fuerzas de seguridad, pero sólo en términos discursivos, porque en cuestiones salariales no las hubo, en condiciones laborales tampoco, profesionalización tampoco. Solo se limitó a hechos “prebolsonaristas”, pero en ningún momento sirvió para empoderamiento de la policía, ni hasta con la lógica de derecha. Lo único que hubo fueron cuestiones discursivas. El caso Chocobar se emparenta con la cuestión del uso de las armas y de las fuerzas. En este último tiempo se han profundizado que la Policía debe usar sus armas más allá de su horario de trabajo. Para Bullrich las pistolas Taser habrían evitado la muerte de este hombre que fue asesinado por el golpe en San Cristobal. Yo vi y eran 6 policías, eso ya lo evita. No era necesario atacar y de esa forma brutal. Obviamente que no todos son culpables de lo que pasó.
APU: Entonces la ministra promueve la impunidad policial, pero las leyes que lo prohíben.
GF: Todos estamos en contra del abuso de las armas. Hay una ley que plantea el uso de la fuerza, de forma progresiva y racional. Hay recomendaciones de las Naciones Unidas donde debe haber proporcionalidad. En Argentina, con la historia de la última dictadura sangrienta el uso de las armas no es un tema menor. El problema es del uso de las fuerzas de las armas en su momento libre, no laboral. Entonces eso construye la imagen donde cada ciudadano además puede salir armado cuando quiera. Se alienta a una doctrina similar al patriotismo pero oculta dos cosas: primero que los policías siguen haciendo otras actividades con su arma de trabajo en donde pueden incluir el uso de ésta, muchas veces son adicionales o labores de custodia. Y segundo, la naturalización del arma. En muchos casos de violencia de género o violencia familiar, usan el arma.
APU: ¿No hay ninguna ley que obligue al policía que no está trabajando a intervenir siempre que sea necesario?
GF: No. Peor aún, la policía muchas veces es reconocida por el arma. Hay una cultura de los barrios más humiles del enfrentamiento con la policía. No pueden usar el arma y pero también hay que generar las condiciones para que el agente pueda vivir tranquilo en su comunidad. Es lo que nosotros llamamos “bienestar policial” que es otro fracaso del macrismo.
APU: ¿El nuevo gobierno debe ocuparse del bienestar policial?
GF: No estoy diciendo que es una buena persona la que asesina a jóvenes por la espalda, lo que digo es que la reiteración de ciertas cuestiones coloca a las personas en ese lugar. Y eso nos obliga a pensar las leyes. El otro día (el juez) Daniel Rafecas dijo algo muy interesante. Las leyes de Obediencia Debida y Punto Final que no profundizaron el juicio a las Juntas y la depuración de los organismos de seguridad, hicieron que hasta pasados los 2000 existiera un sistema de inteligencia de las fuerzas de personas que venían de la dictadura. En Mendoza hubo jueces acusados y son instituciones que han corrido a la democracia. Hubo un caso donde un policía motorizado atropelló a un hombre en las protestas contra la reforma jubilatoria. Ese hombre fue investigado en su cuenta social de Facebook tenía mensajes de apología al delito, insignias nazis. Ese mismo tipo no puede ser tomado por las fuerzas de seguridad, hay una crisis institucional. La segunda cuestión es que ese hombre decía que hacía 24 horas que no iba al baño por cuestiones de hiperprecarización. Con Cristina Fernández de Kirchner mejoraron las fuerzas, pero el macrismo la llevó a cero nuevamente. No tienen patiraria salarial, es a discreción del gobierno.
APU: Si Alberto Fernández gana las elecciones, es posible que comience una agenda mediática sobre la inseguridad que le imponga al gobierno una política securitaria de emparchamiento. Le pasó al mismo Néstor Kirchner con el caso de Juan Carlos Blumberg. ¿Cómo se puede escapar de esta lógica?
GF: Es un buen momento para refundar algunas cosas. Tenemos la reevaluación de lo que hicimos nosotros para justamente volver mejores. Alberto viene con un perfil que va a reestructurar el Estado. Hay gente que puede estar de acuerdo o no con ciertas cuestiones, pero respecto al rol del Estado él tiene mucha experiencia. Fue jefe de Gabinete de un largo período. Muchos tuvimos la experiencia 2003-2015 para resolver estas cuestiones, entre otras.