"Caballo y Barba": poema de Vicente Zito Lema a Fidel Castro
Por Vicente Zito Lema | Ilustración: Gato Nieva
Caballo y Barba
Se llama Fidel Castro,
nació un 13 de agosto
y la gente del pueblo
le dice Caballo;
también El Uno.
No olvido que era un niño con miedos
y preguntas de niño cuando crucé
el Rio de la Plata y conocí y amé
para siempre la bandera que decía con orgullo
“Naide es más que naide…”
No olvido que Napoleón de las victorias
anunciaba que cualquier soldado
lleva en su mochila el bastón de mariscal…
No olvido que todos los ladrillos son
iguales a la hora de sostener la pared
de los sueños cuando los dioses del viento
se obstinan en destrucción y polvo…
No olvido que en lo peor de la noche
sin estrellas la mano que nos sostiene
no tiene nombre ni dueño…
No olvido –vaya que no olvido– aquel
mandato de la belleza: la poesía
será hecha por todos los hombres,
y la muerte ya no tendrá poder…
Y sin embargo…
¿Hubiera sido igual la historia sin él? (Hablo del Uno)
Aquel “si salgo llego, si llego entro,
si entro triunfo”, ¿no se hizo real,
no nació en su conciencia
y creció en su brazo…?
¿No fue él quien puso su cuerpo
frente al Imperio, y le anunció que estaba
en la primera línea para morir combatiendo
en defensa de la patria, y le creímos,
porque su patria era el mundo
y su isla el anuncio del mundo
que sería y será, porque el árbol
está plantado y el perfume de los frutos
fue anunciado (¡se escucha su alegría!)
Y ningún mar desmadrado lo ahogará…?
Vamos Caballo, acaricia tu barba
de la suerte, que ya es luz,
Anda Caballo, veloz o lento, el tiempo es tuyo,
tu galope es la eternidad que nos convoca,
tu bella eternidad sin treguas…
“Naide es más que naide, es cierto,
y tu llevas la bandera…
Anda, amado Caballo, el alba siempre
es fuego, anda…