“Como pata de Chancho”: dos cuerpos sobre el escenario asumiendo su propio vacío

Como pata de Chancho, de Damián Smajo, con la dirección de Gonzalo Carmona y su autor, recuperan la fuerza del Parakultural, evocan un universo entre la tragedia y la comedia, recobrando las formas poéticas de nuestra identidad teatral.

Desde Beckett hasta aquí, la presencia en la ausencia nos ha dado las mejores escenas en el ámbito de lo teatral. Quizá porque el abismo que nos permite habitar es intransferible. ¿Cómo es posible que lo profundo, lo vasto y el deterioro puedan asumir la belleza en un estado poético que nos derrame tanta ternura?

Evocar  nuestra propia existencia es privativo de un quehacer teatral hondo. Porque, cuando el cuerpo ya no sabe qué hacer, sólo puede cantar. Sí, lo dijo Mallarmé cuando hablaba del alma.

Y allí nos detenemos para pensar la genial obra Como pata de Chancho, que nos acerca de manera fulminante para saber cómo un cuerpo en comunión con otro tiene la posibilidad de asumir su propio vacío, creando una hipnosis en el espectador que no puede salir de la ternura que es, también, torpeza de la bondad.

No es cierto que estamos en el Parakultural, pero por momentos tenemos que centrarnos en la duda para situarnos en aquello que fuimos, en eso que somos.

Así, crudamente, la obra es un embrión de La moribunda, una hija ilegítima que busca pujar en las entrañas de la poesía cruda, patética, extremadamente bella.

Herederos de la maldición francesa, hijos legítimos de la tragicomedia argenta, la danza de los hermanos nos llevan a un laberinto sin salida, donde la posesión, toma la fuerza “actante” de la trama.

Una madre ausente, un teatro heredado, un pueblo anónimo en la llanura, son las fuerzas sobre las que dos hermanos, Antonio y Mateo, jugarán al extremo sus propios deseos turbios, encadenados en situaciones desopilantes, trágicas y adorables.

“El teatro es la expresión exacerbada de ese repliegue de realizaciones del pasado hacia la imagen, cada vez más borrosa, cada vez más perfecta”

Así, tal cual lo dice Jean Luc Largarce, es la huella que nos han dejado.

Ficha técnica:

Dramaturgia: Damián Smajo

Actúan: Gonzalo Carmona, Damián Smajo

Voz en Off: Melina Benitez, Valentino Naughton

Vestuario: Melina Benitez

Diseño sonoro: Martin D´agostino

Realización de objetos: Mateo Smajo

Asistencia de dirección: Teo Behrens

Dirección: Gonzalo Carmona, Damián Smajo

Duración: 50 minutos
Clasificaciones: Teatro, Presencial, Adultos

Reservas: comopatareserva@gmail.com