Poema que vuelve: Guillermo Saavedra
Por Norman Petrich | Ilustración: Gabriela Canteros
Guillermo Saavedra (Buenos Aires, 1960) es reconocido no sólo por su labor poética, también tiene una amplia trayectoria como editor y crítico cultural. A tal punto que ha publicado críticas de libros, de teatro y entrevistas en La Vanguardia y El Observador de España, El Mercurio de Chile, así como en otros diarios y revistas de la Argentina y el extranjero.
Ha entrevistado y presentado en público a autores de la talla de Rafael Alberti, Carlos Fuentes, Augusto Roa Bastos, José Donoso, Fernando Arrabal, Juan José Millás, Antonio Muñoz Molina, Olga Orozco, Juan José Saer y Adolfo Bioy Casares.
Publicó los libros de poesía Caracol (1989), Tentativas sobre Cage (1995), El velador (1998, reeditado en 2019 por El jardín de las delicias), La voz inútil (2003), Del tomate (2009, con ilustraciones de Eduardo Stupía), Treinta y tres tristes trípticos (2015, con fotografías de Daniel Caldirola), Diario de viaje de Pretty Jane (2016, en colaboración con Liliana Heer) y amor aleja (2020, también en colaboración con Liliana Heer) tres libros para niños y un volumen de entrevistas con narradores argentinos: La curiosidad impertinente (1993). Su poesía fue traducida al portugués, inglés, alemán e italiano. Desde hace años, se desempeña como improvisador de textos poéticos junto a destacados músicos argentinos. Dirige la revista de cultura Las ranas.
El poema que hoy compartimos pertenece a un libro todavía inédito que lleva el título de Lo improbable y lo ajeno, del cual nos cuenta Guillermo: “Es un libro en el que retomo una forma ya explorada en una de las secciones de mi libro La voz inútil (2003). Allí, como en estos nuevos textos, el verso se constriñe a su máxima brevedad posible e incluso se fragmenta, remedando la dificultad misma del decir poético. Como si el poema quisiera registrar el momento en que la palabra trata de abrirse paso entre la incertidumbre y muestra sus balbuceos, su carácter provisorio, su insalvable inconsistencia. Poemas como instantáneas, fotogramas de la perplejidad que nos asiste a la hora de intentar escribirlos".
Este texto juega dentro de esa fragmentación a preguntarse si se puede pensar el peronismo, y de hacerlo cómo sería. Así que estamos ante un nuevo hallazgo para esta columna semanal. Que lo disfruten.
Modesta aproximación a un movimiento
pensar se
puede todo
pero
no al pero
nismo
como quien
piensa por
caso el
teorema de
Pitágoras: siempre
tendrá un
cateto queriendo
abrazarse al
cuadrado de
la hipotenusa
pensar se
puede sí
pero no al
pero
nismo a
la manera en
que alguien
desglosa la
irrefutable
fórmula del
ácido
sulfúrico
él es la
fórmula
dinámica de
masa
sulfurada en
pleno idilio de
bases detrás
de alguna
solución
mestiza
nacido
cuándo el
pero
áspero
nismo
en libros
capitales
si él es el
hijo de las
más crueles
provincias
hundidas y
olvidadas y
venidas al
arrabal
más con
urbano
y en una
fuente con
patas como
peces
forjó la
convicción de
una alegría
orgullosa
que puso el
cielo abajo
y arriba
tan social la
flor de la
justicia
tampoco es
pero
nismo apenas
el racimo de
veinte verdades
proclamadas por
el líder
sino
tal vez la
suma
imperfecta
descalza y
empeñosa de
ganas y
fracasos de
acuerdos y
traiciones
el pero
el nismo
el muy
muy pero
no se deja
aprehender en
aulas se
retrae y
prefiere
presentarse de
golpe
en plena
calle en
el clamor de
ciertas plazas y
en las zafras o
en el rincón más
castigado de
una fábrica
no es pero
pero apenas esa
idea de una
comunidad
que nismo
organizada: más
bien es la
comunidad
organizando el
fulgor de
cada día en el
difícil e
imprevisible
transcurrir todos
unidos
ni es pero
el nismo
solo fruto que
quepa en
la medida de
las imprescindibles
paritarias ni
en el deseoso
retintín de un
aguinaldo o
en ese pero
nísimo plexo
de escuelas y
hospitales
públicos que
hoy en día
resisten como
todo lo que
alguna vez el
pero
nismo mismo
hizo que alumbre
y ahora se
deshace pero
aguanta
quien sabe el
pero
nismo más
más pero
pero
nista sea
aquel que nos
arropa en
esa casa
indestructible que
a todos nos
contiene y es
Eva: en
esencia una
fuerza mal
decida y
tan indigerible y
tan cabeza
mañosa y
refractaria que
supo también sobre
ponerse a los
tan cíclicos
vandores
si alguna
cosa fuera el
pero pero
nismo mismo
sería
podría ser
quizá dos
alas en un
perpetuo
batir: un
movimiento que
sabe de la
audacia y
la paciencia
porque es muy
larga la
pelea y es
más grande el
dolor y el
enemigo
atando in
terminables
cordones de
despojo
por eso acaso el
pero el
pero
el pero
nismo piensa
mientras teje la
cuerda tensa de
la acción y
al mismo
tiempo cuando
todo es
derrota el
pero el
pero todo el
nismo suelda y
anuda y
rompe y canta
para que
octubre
vuelva aun
más sabio y
luminoso y
para siempre