¿Qué dijeron los países de la región sobre la situación en Brasil?
El país más importante de la región sufrió un duro golpe. Su presidenta, Dilma Rousseff, fue apartada del gobierno y será sometida a un juicio político. Al final de una sesión que duró casi 22 horas, 55 senadores se pronunciaron en favor de juzgar a la mandataria y apartarla del poder por 180 días. Será reemplazada por su vicepresidente Michel Temer, de 75 años. La mandataria aseguró que es víctima de un "golpe moderno" liderado por el "traidor" Temer, que durante cinco años fue su aliado en el gobierno y desde hace un par de meses se convirtió en su peor enemigo.
Ahora bien, ¿qué dijeron los países de la región sobre esta situación?
Empecemos por casa: el ministerio de Relaciones Exteriores y Culto de la Argentina, liderado por la canciller Susana Malcorra emitió un escueto comunicado:
"Ante los sucesos registrados en Brasil el Gobierno Argentino manifiesta que respeta el proceso institucional que se está desarrollando y confía en que el desenlace de la situación consolide la solidez de la democracia brasileña.
En tal sentido el Gobierno Argentino continuará dialogando con las autoridades constituidas a fin de seguir avanzando con el proceso de integración bilateral y regional."
Por su parte, el ministerio de Relaciones Exteriores de Chile, afirmó que "ha seguido con atención los recientes sucesos políticos en Brasil, país de histórica relevancia económica, diplomática y cultural para Chile, incluyendo durante el periodo de la administración de la amiga Presidenta Dilma Rousseff, con la cual hemos mantenido excelentes relaciones.
El Gobierno de Chile expresa su preocupación por los acontecimientos de los últimos tiempos en esa nación hermana, los que han generado incertidumbre a nivel internacional, considerando la gravitación de Brasil en el ámbito regional.
Sabemos que la democracia brasileña es sólida y que los propios brasileños sabrán resolver sus desafíos internos. En el intertanto, Chile reafirma su decidido respaldo al Estado de Derecho, los procesos constitucionales y las instituciones democráticas en Brasil y en cada uno de los países de América del Sur, elementos indispensables para resguardar nuestras democracias, fortalecer nuestra integración regional y nuestra inserción global."
El gobierno de Ecuador: "Expresa su profunda preocupación por los acontecimientos políticos acaecidos en la República Federativa de Brasil, que en las últimas horas han resultado en el apartamiento temporal de sus funciones de la Presidenta Constitucional, Dilma Rousseff.
Asimismo, reitera su decidido respaldo al pueblo de Brasil y al Gobierno constitucional de la Presidenta Rousseff, legítima depositaria del mandato popular expresado en las últimas elecciones democráticas, y contra la que no pesa, hasta el momento, una sola imputación que la vincule con la comisión de un delito común.
El Gobierno de Ecuador expresa su voluntad de que las actuales circunstancias sean pronta y plenamente superadas, en el marco del Estado de Derecho y el estricto respeto a la institucionalidad democrática de Brasil.
Ante la amenaza de una grave alteración del orden constitucional, de profundas consecuencias para el conjunto de la región, el Ecuador apela a la plena vigencia y preservación de las instituciones democráticas y los valores que la sustentan, así como a los principios reflejados en el Tratado Constitutivo de la Unasur, como elementos indispensables para la consecución de la paz, la justicia y la integración de los pueblos de América Latina."
Por su parte, el Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Evo Morales, envió un mensaje por Twitter a Dilma diciéndole que sentía la misma indignación que ella y su pueblo "frente al golpe congresal y judicial. Los pueblos humildes condenamos el atentado contra la democracia y la estabilidad económica en Brasil y la región".