Tiger King: un excéntrico mundo de tigres, armas, política e intentos de asesinato
Por Jazmín Manuel
Si sumamos felinos salvajes como propiedad privada, sectas que involucran shows con tigres, el abuso de drogas, la portación de armas, una candidatura política, una guerra judicial y un asesinato a sueldo, tenemos como resultado la miniserie documental de Netflix, Tiger King: Murder, Mayhem and Madness.
Mostrando el submundo de los populares zoológicos privados de felinos salvajes, la miniserie creada por Rebecca Chaiklin y Eric Goode cuenta con ocho capítulos de 45 minutos aproximadamente. Sigue la historia de Joe Exotic (Joseph Allen Maldonado-Passage) —caracterizado por su estilo trash y redneck—, dueño del zoológico Greater Wynnewood Exotic Animal Park en Oklahoma, y su eterna enemistad y disputa con Carole Baskin, propietaria del santuario animal Big Cat Rescue, que se dedica a rescatar felinos grandes explotados para el entretenimiento y defender a los animales salvajes criados en cautiverio.
La serie comienza explicando el mundo de los zoológicos privados en Estados Unidos y el coleccionismo de animales exóticos, centrándose en Joe Exotic, un hombre extravagante que dedica su tiempo principalmente a dos actividades: coleccionar felinos grandes y odiar a Carole Baskin. Su odio hacia Carole y los grupos defensores de los derechos de los animales lo lleva a una obsesión enfermiza por derribar a sus enemigos. Obsesión que resulta en una batalla legal por años contra ella y, finalmente, lo lleva a terminar en prisión. No hay spoiler que valga, la miniserie comienza contando el final: Joe está preso, acusado de contratar a un sicario para intentar asesinar a Carole Baskin.
Lo que comienza como un recorrido por el mundo de los felinos salvajes se va transformando en un recorrido por la vida del protagonista, que constantemente sobrepasa la línea de lo bizarro: sus tres esposos, su fanatismo por las armas, su obsesión con ser famoso e incluso su breve carrera política, cuando se presentó como candidato para ser gobernador de Oklahoma. Joe representa el estereotipo de white trash, un hombre blanco con un nivel de educación muy bajo, gran defensor de la portación de armas, consumidor de drogas fuertes y simpatizante de la derecha estadounidense. Un hombre que más allá de los shows con los que se ganó la vida, es un show en sí mismo.
Entre los otros personajes sobresalientes de este documental se encuentra un ex traficante de drogas que trabaja cuidando tigres, una trabajadora del zoológico que pierde un brazo en un horrible accidente con un animal y vuelve a trabajar tan sólo una semana después, un productor de televisión que trabajó en un programa de Joe, un millonario que busca quedarse con los felinos, las hijas y la esposa del ex marido millonario de Carole —que misteriosamente se encuentra desaparecido hace muchos años—. Entre todos ellos, hay alguien que también se destaca especialmente: Bhagavan Antle, también conocido como Doc Antle, un doctor especializado en “ciencias místicas” y fundador de The Institute for Greatly Endangered and Rare Species (T.I.G.E.R.S.), una reserva natural en Carolina del Sur. Doc Antle, junto con su esposa y sus cinco novias, manejan la reserva respetando una serie de reglas similares a las de una secta hippie: las mujeres que trabajan para él no utilizan sus nombres reales y tienen que abandonar su vida por completo para enfocarse a vivir y trabajar en la reserva. Antle es el gran referente de Joe, quien lo inspiró a comenzar su negocio como coleccionista de felinos salvajes.
Desde su estreno, esta miniserie se convirtió en una de las producciones de Netflix con más vistas de todos los tiempos, ganándole en audiencia en su primer capítulo a Stranger Things. En la actualidad, se estima que aproximadamente el 10% de la población estadounidense vio el documental. Su éxito no sorprende, teniendo en cuenta la maravillosa mezcla de excentricidades, traiciones y misterios. Esta serie nos brinda la oportunidad de presenciar un mundo totalmente desconocido y del que nunca seremos parte. Un submundo bizarro que constantemente roza lo grotesco y que cuenta con una dosis de comedia y violencia que acapara la atención del público.
Tiger King: Murder, Mayhem and Madness es una serie que no podes dejar de mirar y que te hace olvidar que lo que estás viendo es una historia 100% real. Te hace variar entre el desagrado, la fascinación y lo absurdo. Por momentos te hace reír tanto que, por un minuto (o muchos), llegas a olvidarte de la explotación y sufrimiento de los animales que, hasta hace unos pocos años, podían ser legalmente apropiados por personas adineradas en Estados Unidos, y que hoy siguen cautivos en zoológicos. Animales contrabandeados que son encerrados en jaulas y que nunca van a conocer la vida en libertad. Incluso, te hace sentir cierta simpatía con respecto a Joe Exotic, a quien por momentos muestran como una persona sensible y tierna, pero cargado con una violencia aterradora.