Tres toneladas: la serie con la que Cristina criticó a los fiscales
En el contexto del proceso judicial que busca forzar la figura de la asociación ilícita para vincularla, Cristina Fernández de Kirchner expresó— a través de su cuenta de Twitter— que Clarín y los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola debían “dejar de mirar Netflix” y agarrar la “Constitución, los libros de derecho administrativo y el código penal y procesal”. Apuntó a la repetida referencia, surgida en una nota del medio, de que hay “tres toneladas de pruebas” pesadas y acumuladas, según el propio Luciani, en Comodoro Py y frente a Tribunales.
La vicepresidenta de la Nación lo comparó con la miniserie documental Tres toneladas: Atraco al Banco Central de Brasil, estrenada en marzo de este año— no vamos a suponer que los miembros del Ministerio Público Fiscal consultaron el guión, a cargo de Daniel Billio—. La producción, dirigida por Rodrigo Astiz y producida por Mixer Films, narra a lo largo de tres capítulos, de alrededor de una hora cada uno, y mediante el testimonio de policías y ladrones y del material de archivo, el plan, desarrollo, escape e investigación del caso.
Durante el fin de semana del 6 y 7 de agosto de 2005, seis meses antes del robo al Banco Río de Acassuso, reconstruido recientemente en Los ladrones: La verdadera historia del robo del siglo, un grupo de personas usó un túnel de casi 80 metros de largo para entrar a la bóveda del banco ubicado en Fortaleza y escapar con más de 160 millones de reales— o casi 3,5 toneladas—. Eligieron billetes que iban a ser sacados de circulación y que no tenían números de serie registrados, para no ser rastreados, evadieron o inhabilitaron sensores y sistemas de alarma, por lo que recién se descubrió el hecho el lunes por la mañana, y fundaron una empresa fantasma de césped natural y sintético, de plantas y de otros artículos de jardinería, alquilando cerca de la zona, para lavar y justificar el dinero.
Sin testigos y sin evidencias, el robo marcó un antes y un después en Brasil. En especial por el valor del botín, la prensa se apresuró en llamarlo “El robo del siglo”— lo que abre otra discusión entre países hermanos—. Más allá de algunas similitudes con el ocurrido en nuestro territorio, en este caso hay una cantidad indeterminada de involucrados y hasta el presente los sospechosos arrestados superan los cincuenta. Para peor, algunos fueron secuestrados y extorsionados, incluso por policías federales, al punto que uno de ellos apareció muerto. También hay varios señalados como prófugos.
Tres toneladas: Atraco al Banco Central de Brasil apuesta a una narrativa fuerte, poniendo en escena rápidamente testimonios y detalles novedosos y recreando momentos clave del asalto. Además de policías y ladrones, incorpora a periodistas, peritos y académicos para una mayor diversidad. De esa manera, busca sumarse a la lista de las producciones brasileras en la temática de la plataforma, como Hermandad o Buen día, Verónica.
Los robos a bancos siempre funcionan para Netflix. No importa si es ficción, como La casa de papel, o realidad, como los casos mencionados. Las producciones siguen fascinando a las audiencias y esta no fue la excepción. Tras haber estado en marzo en los principales rankings, luego del tweet de Cristina la miniserie ha cobrado un nuevo impulso.