Un año de velorio para la ciencia argentina
Por Leandro Andrini*
Este martes 8 de agosto, científicos y tecnólogas se dieron cita en el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva para dar continuidad a los reclamos que vienen teniendo desde diciembre próximo pasado cuando se supo oficialmente el recorte en el ingreso a planta de investigadores y en el otorgamiento a becas doctorales y postdoctorales.
Nada es un error. Nada es una improvisación. Absolutamente nada, de las acciones de este gobierno.
En su momento advertimos que dado la hoja de ruta del ministro Barañao, sus palabras no caerían en saco roto, en eso de que “la gente se vaya”. Patricia Bullrich niega la desaparición de Santiago Maldonado, traficando la denuncia de desaparición a manos de las fuerzas de seguridad como búsqueda de paradero, y Esteban Bullrich se jacta en que hacer es poner un pibe preso cada día.
Este martes 8 de agosto, ingresó la policía para intimidar a la pacífica manifestación denominada “Velorio de la Ciencia”, cuyo montaje también tiene las características del arte performativo-político, y que involucra la creatividad de un sector que el año pasado supo realizar una toma del ministerio por el lapso de cinco días.
En el mismo día en que el presidente del INITI decidió “cerrar” la sede central de forma que no se viera afectada por la manifestación y huelga propuesta por el gremio ATE.
Detrás de la policía emergió la figura de Barañao, para recibir a una delegación de excluidos (excluidos por sus políticas). Lo que científicas y tecnólogas proponen como acto político, en la luctuosidad del evento, lo llevan al extremo del anti-acting quienes no disfrazados aparecen con sus trajes de fajina para amedrentar en fajar a quienes se manifiestan en su justo reclamo.
Todo lo demás que quiera decir el cínico discurso del diálogo es sí puesta en escena.
* Investigador (CONICET) en Área Química (Química-Física).