Homenaje a Mariano Witis: “No olvidemos, tengamos memoria para no repetir la historia”
Por Florencia Rey
A 19 años de su asesinato a manos de la Policía Bonaerense, este sábado 21 de septiembre se inauguró una escultura en la Plaza 9 de Julio de Martínez en homenaje a Mariano Witis. Al igual que todos los años, su familia organizó un festival para conmemorar la vida de Mariano. “El Principito está cantando, elevando al cielo sus brazos pidiendo: dejen de disparar. Está elevando una plegaria de Nunca más, de bajen las armas. No olvidemos, tengamos memoria para no repetir la historia”, sostuvo su madre, Raquel Witis, sobre la pieza artística, en conversación con AGENCIA PACO URONDO.
En el marco de una nueva conmemoración del asesinato de Mariano Witis, se emplazó la escultura “El Principito”, del artista Martín Graziano. “En el año 2011, siempre pensando cómo hacer para concientizar sobre la violencia institucional, terminar con las muertes evitables producidas por el Estado y reafirmar el derecho fundamental de respetar vida, le pregunté a Martín Graziano si se animaba a hacer una escultura en memoria de Mariano. Una escultura cuyas ideas y fuerza estuvieran en la vida, la libertad, la música y la alegría. Tuvimos varias charlas en familia con él, hasta que fue tomando forma en su corazón y en su mente El Principito. Cuando la vi me conmovió, sentí que Mariano estaba allí, que Martín puso mucho amor en esa obra”, relató Raquel Witis sobre el proceso de armado de la escultura.
“La idea era donarla al Municipio para emplazarla en el espacio público para que los vecinos pudiesen apropiarse del mensaje y también como agradecimiento por el acompañamiento en nuestra búsqueda de justicia a lo largo de tantos años”, explicó Raquel y agregó: “El Principito recorrió un largo camino hasta encontrar su lugar definitivo, la Plaza 9 de Julio de Martínez, lugar donde Mariano jugó, corrió, se divirtió con la calesita y la sortija”.
Sobre el artista que realizó la escultura con metal reciclado, Raquel expresó: “Martín fue compañero de Mariano en el Coro del Centro Polivalente de Arte. Por eso el Principito está cantando, elevando al cielo sus brazos pidiendo: dejen de disparar. Como me dijo la mamá de Nati Melmann, Laura, está elevando una plegaria de Nunca más, de bajen las armas. No olvidemos, tengamos memoria para no repetir la historia. Además Martín realizó, por propia iniciativa, el símbolo de paz, con clavos cromados, como una corona de espinas para colocar en su tumba. De allí surgió la elección para proponerle la escultura”.
“Muchos y muchas lo hicieron posible. Fue gracias al apoyo incondicional de la familia, de la Comisión Memoria Zona Norte, del concejal Marcos Cianni que impulsó el proyecto para su emplazamiento en San Isidro, del Concejo Deliberante y del Intendente Gustavo Posse que designó esa plaza como lugar definitivo. Y no puedo dejar de mencionar a quienes pusieron sus manos y fuerza para llevarla y colocarla en su pedestal”, resaltó la referente en la lucha contra la violencia institucional sobre quienes participaron de cada paso en el armado e instalación de la escultura.
Después de la inauguración de “El Principito”, la plaza se llenó de música como cada 21 de septiembre para recordar a Mariano. “La música nos une, nos eleva, nos acuna y nos sostiene en la lucha. Habrá coros, solistas y grupos, amigos entrañables de canto y correrías; y músicos solidarios siempre presentes en causas justas”, comentó Raquel sobre el festival. “Es imprescindible para visibilizar la violencia institucional y para luchar contra ella recurrir al arte en cualquiera de sus expresiones, porque nos cuenta, nos muestra, nos canta la historia de los pueblos, sus dolores, sus alegrías, sus luchas, sus resistencias, sus conquistas. Como dice la canción por la vida, nada más importa. Quien cuida y guarda la memoria guarda y cuida la vida”, cerró Raquel.
En este mismo sentido se expresó Raquel en redes sociales: "Estamos agradecidos porque hoy el principito, escultura realizada por Martin Graziano en memoria de Mariano ha encontrado su lugar en esta plaza. Esta plaza donde Mariano, jugó, rio, disfruto de la calesita y su sortija. Gracias Martin por el amor que pusiste en ella, la primera vez que la vi sentí que estaba ahí, Mariano volvió a la plaza".