Reclamo en defensa del espacio público en el sur de Mar del Plata

  • Imagen

Reclamo en defensa del espacio público en el sur de Mar del Plata

19 Agosto 2022

En el sur de la ciudad de Mar del Plata, entre Punta Mogotes y el arroyo “Las Brusquitas”, límite del Partido de General Pueyrredón con General Alvarado, se extiende la Reserva Forestal y Turística Paseo Costanero Sur, territorio cedido por la provincia de Buenos Aires al municipio balneario por decreto 541/80, conforme a la ley 9347.

Debido a sus particulares características de belleza natural y ubicación con acceso a las playas, siempre ha sido un espacio en disputa y anhelado ambiciosamente por empresas privadas. En estos días es noticia por un reclamo en el que participa el espacio Colectivo Faro de la Memoria junto a otras organizaciones, ante la posible cesión de un sector de dos hectáreas a un particular. En el proyecto de ordenanza se menciona como finalidad de la cesión: "Establecer un centro recreativo con instalaciones destinadas a alojamiento temporario y recreación. Establecimiento gastronómico, con elaboración artesanal de bebidas espirituosas por destilación” (lease una destilería de gin). Incluye un predio para guarda y estacionamiento de vehículos además de sitio de carga y descarga.

El espacio en cuestión es actualmente parte de la Asociación Civil Centro Recreativo Luis Piedrabuena, cuya cesión también ha sido y sigue siendo objeto de cuestionamientos.

Antecedentes

Históricamente el predio -actualmente camping Luis Piedrabuena- un sector de unas dos hectáreas arboladas, perteneció y fue parte de la estructura de funcionamiento de la Escuela de Suboficiales de Infantería de Marina (ESIM), extendiéndose hasta la bajada pública hacia la playa hoy conocida como “Horizonte”. La ESIM fue parte de la estructura represiva del Fuerzas de Tareas N° 6 de la Armada, con su comando en la Base Naval, conformando la dirección del Grupo de Tareas 6.2. O sea, el director de la Escuela de Suboficiales de Infantería de Marina ( ESIM) era, a la vez, el jefe del Grupo de Tareas y, por lo tanto, del Centro Clandestino de Detención (CCD). La totalidad del predio (16 hectáreas) fue operativa y materialmente funcional a la operación del plan de desaparición de personas.

En diálogo con AGENCIA PACO URONDO, Ana Pecoraro responsable del Colectivo Faro de la Memoria explicó: “Hasta la última promoción de convocados al Servicio Militar Obligatorio, los conscriptos realizaban guardias en el camping. En el año 1990 la ESIM fue trasladada a Bahía Blanca y al derogarse el Servicio Militar la Armada empieza a dividir y a explotar la zona en conflicto. Parte de la zona costera fue entregada al Aquarium, que hoy sigue funcionando. Un negocio de la mencionada fuerza del cual no queda bien claro si fue una cesión o venta. En 1992 comienza la construcción del Aquarium y en 1998 extienden la concesión y agregan el parque del faro “Había una Vez” que funcionó en todo el predio hasta 2002. Con la construcción del Aquarium se pierden las dependencias de uno de los tres Centros Clandestinos de Detención que funcionaron allí, que era un polvorín. Otro era la Sala de Comunicaciones y el tercero, la propia ESIM. Debido a la instalación del parque, los Organismos de Derechos Humanos iniciaron acciones judiciales y realizaron escraches frente al mismo. A fines del 2000, con el comienzo de los Juicios por la Verdad en Mar del Plata y se instala una medida de no innovar y el parque de diversiones cierra en 2002. En 2014, con las políticas de memoria, verdad y justicia este predio , como otros CCD, fue entregado para abrir el espacio de memoria". 

Y agregó: "También durante los noventa se alambra un sector hacia el sur, toma posesión un ex militar, Menesier de inteligencia, y lo transforma en un camping de recreación para las fuerzas. Desde entonces la explotación del camping, sobre un terreno que es municipal desde los ochenta, se realiza sin pagar canon ni concesión alguna y sin tener habilitación”.

Importancia de la Reserva Forestal Paseo Costanero Sur 

La reserva cuenta con 27 kilómetros de largo y un ancho variable entre 30 y 100 metros hacia el continente y de la ruta hasta la línea de ribera, totalizando una superficie de 800 hectáreas. La calificación de “reserva” por parte del municipio ya que se encuentra en una zona cercana de influencia a la Reserva Natural de Objetivo Definido Mixto Geológico y Faunístico Restinga del Faro, declarada como tal según Decreto 469/11.

La Ruta Provincial No 11, denominada Presidente Arturo Illia, que comunica las ciudades de Mar del Plata y Miramar, articula en sus márgenes el espacio protegido. Posee rasgos paisajísticos, geológicos, de fauna y flora de especial relevancia, ligados principalmente a la presencia de playas, médanos, acantilados y sectores forestados; todos ellos sometidos a una importante presión antrópica, debido al crecimiento urbanístico y emprendimientos turísticos - recreativos privados, elitistas y exclusivos que se han originado al sur del Partido.

Bajo el lema “La Reserva no es un bar'', desde las redes del espacio Colectivo Faro de la Memoria, se pueden sumar adhesiones.

Situación Actual

Recientemente, el Intendente de General Pueyrredón, Guilermo Montenegro, presentó un proyecto para reconocer al usurpador, darle entidad como titular de derechos sobre el predio y la posibilidad de establecer allí un bar con destilería de gin.

Los balnearios de la zona sur de la ciudad, que son casualmente los que más cobran por acceder, poseen un padrinazgo vencido, privando a marplatenses y visitantes de poder disfrutar de parte de la Reserva Forestal Costera, que es un espacio público.

Así las cosas, se configura un modelo de ciudad que intenta avanzar con las privatizaciones de otros espacios públicos, como se está haciendo con el Parque Camet y se intentó también con la Plaza del Agua. Bajo una serie de irregularidades hace unos días se realizó una carrera de motos y cuatriciclos “Enduro Pale” por las playas del centro, evento celebrado por el diario local La Capital.

La Universidad Nacional de Mar del Plata, por su parte, se sumó a esta causa y mediante nota al Ejecutivo Municipal, presentada en junio de este año, expresan su visión sobre la potencialidad del sector para establecer un polo educativo en un proyecto que se está elaborando en forma conjunta con la Secretaría de Derechos Humanos.

Entre un bar y una sede universitaria no hay mucho que pensar, pero lamentablemente no está resultando un desafío sencillo. Es claro que la intervención de los vecinos en unión con las instituciones barriales, organismos en defensa del medio ambiente, la Universidad Nacional de Mar del Plata y quienes trabajan por preservar la memoria, resultará fundamental en el desenlace de este conflicto que lleva años y que se va nutriendo de nuevas amenazas que algunos creen que van de la mano con el progreso.