Gabinete macrista: un productor de Fantino, encargado de las políticas universitarias

Por Nicolás Adet Larcher

Esteban Bullrich, futuro Ministro de Educación dentro del gobierno de Mauricio Macri, designó como secretario de políticas universitarias a Juan Cruz Ávila, productor del programa Animales Sueltos que conduce Alejandro Fantino por América. La designación, despertó críticas y polémica no solo desde la oposición sino también desde los medios macristas.

La Secretaría de políticas universitarias es relevante para el desarrollo educativo ya que sirve de nexo para la derivación de presupuesto hacia las universidades, un hecho que no es menor y que fue transcendental en estos últimos años bajo el mando de Aldo Caballero, destacado por su experiencia y su formación académica.

La designación de Ávila responde a la lógica que el macrismo viene aplicando y que consiste en colocar en puestos claves del gabinete a personas vinculadas al mundo empresarial. En el caso de Ávila, el mismo fue productor general de Torneos y Competencias (TyC) (empresada creada por su padre Carlos Ávila). Hace poco tiempo se recibió de psicólogo y trabaja en el seguimiento del presupuesto en la Facultad de Medicina y en el Hospital de Clínicas según afirmaron desde el macrismo.

A La Nación no le gustó

La designación no cayó bien entre los medios afines al espacio de Cambiemos, lo que quedó evidenciado en una entrevista que el diario La Nación le realizó a Esteban Bullrich. La periodista Luciana Vázquez arrinconó al futuro ministro de Educación preguntando acerca de la experiencia de Ávila en el área de políticas universitarias. Ante esto, Bullrich respondió que “trabaja en la UBA desde hace tiempo” y que venía trabajando con el decano de Medicina.

Bullrich afirmó además que conoció a Ávila “cuatro meses atrás, desde que empezó la campaña”, sin brindar mayores detalles.  

“¿No hay personas con más experiencia y conocimiento en un área tan específica?”,  preguntó la periodista, ante lo que el futuro funcionario respondió que “seguramente hay otras personas idóneas”, que el problema principal era “la grieta” y que en este sentido consideraba a Ávila una figura “neutral”.

Después se produjo un diálogo insólito sobre las universidades “peronistas”.

-¿Cuáles son las universidades peronistas a las que se refiere?

-Las nuevas. Las del conurbano.

-¿Consultó con alguna de ellas el nombramiento de Avila?

-Sí, con algunas.

-¿Con cuáles?

-Con algunas.

-Insisto: ¿con cuáles?

-Con algunas.

Par finalizar, la periodista remarcó que el nombramiento puede ser “un disparate o una genialidad” lo que dio lugar a una respuesta de Bullrich, expresando que Ávila conocía la universidad porque era psicólogo y trabajaba en el Hospital de Clínicas. Antecedentes que parecen no ser suficientes.