¿Lavado de dinero? Macri tuvo durante diez años una cuenta en un paraíso fiscal
Por Nicolás Adet Larcher
El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) publicó una serie de documentos denominados “The Panamá Papers”, donde se revela el nacimiento de miles de empresas “offshore” mediante la gestión de la firma de abogados Mossack Fonseca.
Según ICIJ, la investigación cuenta con alrededor de 11 millones de documentos que involucran a celebridades, políticos y figuras reconocidas a nivel mundial que utilizaron las empresas offshore creadas por la firma de abogados para fugar y gestionar su patrimonio en el exterior, en paraísos fiscales. En total, los involucrados son doce jefes de estado, 128 políticos, 61 familiares, socios, amigos, etc.
Las personalidades mencionadas por los medios van desde Michel Platini, presidente de la FIFA, hasta el rey de Arabia Saudita, Salman Bin Abdulaziz pasando por el presidente Mauricio Macri y funcionarios de Rusia que responden a Vladimir Putin.
En el caso del presidente argentino, los documentos lo involucran dentro de la administración de Fleg Trading Ltd a una empresa que se habría constituido en 1998 y se disolvió en el año 2009. Ahí, Mauricio Macri, su padre Franco y su hermano Mariano, tenían el rol de administradores. Ese negocio no figura en las declaraciones patrimoniales que Macri presentó cuando era Jefe de Gobierno porteño en 2007 y 2008. Según se detalla en la investigación, el presidente tampoco habría detallado el origen ni la ubicación de alrededor de 158 mil dólares en activos en el extranjero en el año previo a la disolución de Fleg Trading.
Inmediatamente, luego de la difusión de los documentos, el portavoz de Macri, Iván Pavlovsky, afirmó en un comunicado que no se había declarado nada relacionado a Fleg Trading Ltd como un activo financiero porque no había participación accionaria de Macri en la misma. En palabras de Pavlovsky, Macri solía hacer “de vez en cuando de administrador” porque Fleg Trading era utilizada como instrumento para articular participaciones con Brasil. La insólita respuesta oficial aseguró que "dicha sociedad (…) estuvo vinculada al grupo empresario familiar y de allí que el Señor Macri fuera designado ocasionalmente como director”.
Si bien ICIJ aseguró que los documentos filtrados son muchos, apenas se conocieron unos cientos para el acceso público, lo que dificulta obtener mayor información respecto a las revelaciones. El periódico británico The Guardian aseguró que gran parte del material no será difundido. Sumado a esto, la divulgación contó con el protagonismo de medios de comunicación que responden a determinados intereses (centrando su atención en Rusia) hecho que tampoco facilita una cobertura amplia sobre el tema en cuestión. Para este trabajo, participaron 370 periodistas de medios distribuidos en 76 países que hicieron un seguimiento continuo de facturas, correos electrónicos y documentación respecto a clientes de la firma de abogados que estaban involucrados en evasiones millonarias, tráfico de armas, de personas y negociados vinculados a empresas petroleras.
El peso de los medios tradicionales en la difusión de los documentos, otorga trascendencia a ICIJ sin tener en cuenta intereses de por medio, si se observa que el consorcio de periodistas tiene su base de financiamiento en “The Center of Public Integrity” que recibe dinero de distintas organizaciones y empresarios entre los que se encuentran la Ford Fundation, Carnegie, el Rockefeller Brothers Fund, Rockefeller Family Fund, W.K. Kellogg Foundation o la Open Society Foundation que pertenece al magnate George Soros.
La filtración, involucra fuertemente a países como Venezuela, Rusia, Corea del Norte, Zimbabwe, Siria e Islandia, quienes mantienen conflictos explícitos contra Estados Unidos, país que llamativamente se encuentra prácticamente invisibilizado entre los documentos.