Juani Rodriguez (Andando Descalzo): “En 'Paradójico' cada canción tiene el sonido que me hubiese gustado que tenga”
Juani Rodriguez, cantante de Andando Descalzo, conversó con AGENCIA PACO URONDO sobre Paradójico, el nuevo trabajo de la banda y el octavo dentro de su extensa trayectoria.
“(La presentación de Paradójico en Vorterix) fue muy esperada, principalmente porque el disco había salido alrededor de un mes y medio antes. Con la grabación de este trabajo estuvimos unos cuatro meses sin tocar, realmente teníamos muchas ganas de subir a un escenario que es lo que más nos gusta hacer a nosotros. Salió muy bien, superó las expectativas que teníamos”.
“Tocar el disco nuevo es muy grato, me representa mucho, me siento muy identificado con él. Quizás no siempre me pasa con la totalidad de las canciones de un disco o quizás el disco anterior, Extraño, lo fue en todo sentido”.
“(Pablo ‘Bocha’ Otero) hace rato que viene haciendo un trabajo que es como la previa a laburar con un productor. Nuestros demos, arreglos y todo eso, la interacción con los productores, de alguna forma estaba a cargo de él. Acá fue más un laburo de mucha responsabilidad. De parte de él y también nuestra, porque le tenés que dar el espacio, dialogar pero darle la última opción. Somos una banda de voz y voto bastante democrático, nos conocía bien a cada uno, ya sabía qué puntos necesitaba tocar. Funcionó muy bien. Yo estoy muy orgulloso de él, con la producción que hizo”.
“En pandemia grabamos un disco, que fue Extraño. De hecho, hicimos bastantes cosas desde casa. La verdad que la experiencia, a la distancia y con un nuevo disco, estuvo buena. A la vez, yo salía por calles que de a ratos se veían totalmente desoladas, al ser personal esencial. Después, claramente todo se hizo muy tedioso, pesado. Me parece que se pasó de rosca. Nos pasó, por ejemplo, que la primera vez que todos podíamos tocar las canciones de ese disco fue en los ensayos para el recital del Hipódromo de Palermo donde lo íbamos a presentar. ¿Por qué? Porque la composición fue desde casa, nos pasábamos los demos vía mail y con una computadora que teníamos en casa y una plaquita íbamos sumando nuestras cosas. Fue un experimento y la verdad que ayudó a pasar ese momento”.
“El tema ‘Chamánico’, que ahora se llama ‘Chamánico en la tormenta’ y forma parte de este disco, lo había compuesto para Extraño y queda fuera, al igual que ‘Nada que perder’. Son dos canciones que reciclamos, las agarré e hice un refresh, a ver qué rescataba”.
“Cuando fuimos nominados a los Premios Gardel era la primera vez que estábamos nominados a un premio, Era a mejor disco del año, que estábamos compartiendo junto a Las Pelotas, que es la banda de mi vida, y Airbag, que es quien termina ganándolo. Lo tomamos también como un reconocimiento a la trayectoria. De nosotros mismos, como diciendo ‘sin esperar nada, pasan los años y a veces la vida te sorprende’. Por suerte, no salimos a comprar nada a cuenta porque, para el disco siguiente, cuando pensás ‘los nominaron a los pibes, vamos a invertir el doble’, eso no pasó”.
“Así como no nos subimos a ninguna con la nominación al Gardel, tampoco nos asustamos cuando no teníamos nada. Encima como que cuadraba: el ‘Bocha’ tenía que ser el productor, medio que hasta coincidía con el presupuesto que manejábamos. Teníamos que administrar bien el presupuesto, ver dónde poníamos la plata, en qué estudio para grabar las bases y terminarlo en el nuestro”.
“La cura’ no iba a ser el primer corte, era 'Cartagena'. Ese momento de vacío existencial, de no saber bien dónde, se coló. Porque el piso se te mueve cuando te quedás sin compañía. Es una crisis que no generaste, pero existe. 'La cura' habla de todo ese proceso, de que hay cosas que pueden no salir como uno la espera y eso, en realidad, es el empuje para buscar otra idea nueva. Era una canción muy distinta al resto. Era un tema que no tenía ningún feed en un disco que tiene bastantes invitados. Nos presentábamos con una carta toda nuestra, tenía una letra que nos representaba mucho y un sonido nuevo. Sabía que iba a generar cierta controversia entre los más ortodoxos seguidores y todo eso me resultó atractivo, no era lo más esperable de Andando en el disco”.
“Cuando me pongo a componer es como un proceso. Ahora no estoy haciendo absolutamente nada. Cuando acepto y estoy de acuerdo con lo que le doy a la banda, con lo que le estoy entregando, empiezo a buscar cosas distintas. Me empiezo a poner más extremo, hasta incluso voy adquiriendo más confianza en mí”.
“Me gustan las estructuras, no dejan de ser formas matemáticas y el disco está pensado así. Empieza con una estrofa, con un estribillo, después el estribillo va la intro, de nuevo estribillo y luego una estrofa. Es parte del dinamismo”.
“(‘Mensajes’) habla de un momento muy especial, mío, lo tomé como un momento muy sensible y lo quería contar de alguna forma, cubriéndome un poquito. No dejaba de ser un bicho raro, al igual que ‘La Cura’. Siempre aparecía entre las elegidas por nuestros cercanos. Se lo dimos a Nacho (Santos), que es el director de la orquesta Baigón, para que le agregara unas cuerdas, me parece que quedó muy copado. Nos pareció que era una buena forma de cerrar el disco, con una canción media loquita”.
“En Paradójico, por lo menos desde mi punto de vista, cada canción tiene el sonido que me hubiese gustado que tenga, y eso también es algo para resaltar de quien lo mezcló, Martín Pomares, que está dentro del top 3 en Argentina”.
“(Las muertes de Gabriel Ruiz Díaz y Palo Pandolfo) las vivimos de manera muy distinta, porque Gaby tuvo un accidente hace muchísimos años… me gustaría ser muy respetuoso, equilibrado con las palabras y no sé si son las adecuadas, pero no sé cómo estaba siendo su calidad de vida, tenía muchos problemas de salud y esto lo venía trayendo durante muchísimos años. En el caso de Palo Pandolfo fue algo inesperado, repentino. Justo con él habíamos tenido bastante interacción en los últimos años, no sólo de reversionar temas juntos sino de vernos, juntarnos, hablar. Esa pérdida tan repentina, golpea”.
“Cuando fui al homenaje al que tuve el placer de ser invitado, en el CCK, ahí conocí a Lito (Alito Spina), su bajista. Por esas cosas de la vida, vino y me dijo que quería tocar con Andando y la verdad que fue un gran acierto. Es el único cambio que tiene la banda, los demás estamos desde el primer disco, somos los mismos de siempre, diría Chizzo (Nápoli). Fue una luz, trajo energía, una linda energía. Es un ser muy especial a quien estoy agradecido de que esté tocando en Andando”.
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